Naciones Unidas.- El canciller de Brasil, Celso Amorim, pidió hoy ante el plenario de la Asamblea General de la ONU el regreso a Honduras y "sin amenazas a su libertad" del ex presidente hondureño Manuel Zalaya.
Brasil "condena los movimientos antidemocráticos, como fue el golpe de Estado en Honduras", señaló el ministro brasileño de Relaciones Exteriores durante la apertura de los debates de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Asimismo, consideró que "el regreso del ex presidente Zelaya sin amenazas a su libertad es indispensable para la total normalización de las relaciones de Honduras con el resto de la región".
El caso de Honduras y la destitución de Zelaya de la Presidencia del país tras un golpe de Estado el 28 de junio de 2009 fue uno de los asuntos centrales de los debates y reuniones durante la Asamblea General que se celebró en septiembre de ese año.
Tras el golpe de Estado, el Parlamento designó a Roberto Micheletti como mandatario.
Zelaya fue expulsado del país y llevado a Costa Rica, posteriormente regresó a Honduras y se refugió durante varios meses en la embajada de Brasil en Tegucigalpa, hasta su posterior exilio en República Dominicana.
Durante su intervención, el ministro brasileño se refirió también a la necesidad de avanzar en una mayor integración entre Centro y Suramérica, y elogió la creación de la Comunidad de Estados de Latinoamérica y del Caribe.
Además, reiteró que su país "condena, al igual que el resto de Latinoamérica y el Caribe, el embargo ilegal (de EE.UU.) contra Cuba", que consideró que "daña los esfuerzos de millones de cubanos por el desarrollo". EFE