Envejecemos inevitablemente y los estudios socio- económicos más recientes plantean que desde 2005 y hasta 2050, la población de más de 60 años de edad representará cerca de la mitad del crecimiento total en el universo. ¿Cómo enfrenta la República Dominicana este desafío?
Un interesante trabajo de la colega Yokaurys Vázquez trae a la reflexión lo que realmente significa el envejecimiento gradual de la población dominicana, sobre todo en momentos en los cuales el Estado no destina los recursos necesarios para estas capas vulnerables de la población.
Más allá de lo que sentimentalmente representa este grupo poblacional, la realidad indica que en no lejanos tiempos serán, o seremos mayoría, las personas de la tercera edad. Se plantea que “para el año 2025 habrá más de 98 millones de mayores de 60 años en la región y resulta urgente frenar el maltrato contra el sector”.
En la República Dominicana se estima que existen aproximadamente 1 millón 200 mil envejecientes. Pero, esto es según el censo del año 2002, que no es confiable. En 2025, existirán, aproximadamente, 2 millones 600 mil y en 2050 más de la mitad de la población serán personas mayores de 60 años.
En realidad, muchos adultos mayores en el país subsisten por las remesas y la ayuda económica de familiares. Un mínimo porcentaje está incorporado a la vida productiva y en el aspecto salud, todavía no se aplica un sistema de seguridad social en la medida necesaria, lo que les coloca en un grupo desprotegido, olvidado y frágil.
Dominicanoshoy.com ha publicado trabajos acerca de la rebaja del Gobierno al presupuesto destinado a los asilos de ancianos, justo cuando otros titulares de diferentes medios internacionales resumían su preparación para un mundo que está envejeciendo.
En verdad, se impone la búsqueda de políticas alternativas, acá y allá. Aquí, entre los problemas sociales que confronta la sociedad dominicana, el de los envejecientes, en particular, significa más que una pena, verdadera incertidumbre del mañana.
