El presidente Barack Obama pidió el lunes a los donantes demócratas que asistieron a un evento de recaudación de fondos apoyado por estrellas de la NBA en Coral Gables, que impulsen a los votantes recordándoles que su elección en el 2008 "fue solo el comienzo del sueño».
Obama habló en la casa del ex estrella del Miami Heat, Alonzo Mourning, a quien se unieron los jugadores del Miami Heat Dwyane Wade y Chris Bosh, y el ex jugador de los L.A. Lakers y ahora miembro del Salón de la Fama de la NBA, Magic Johnson.
Obama dijo a los donantes que la economía de Estados Unidos está comenzando a recuperarse porque los legisladores estuvieron dispuestos a asumir votaciones difíciles. ‘‘Pero los republicanos», añadió, "dijeron que no una y todas las veces… no tienen ideas nuevas».
"Tenemos que decirles en estas elecciones: no van a recuperar las llaves», dijo refiriéndose a los republicanos, a los que acusa en los eventos de recaudación de conducir la economía hacia una zanja, para después ponerse a mirar entre lamentos, mientras los demócratas se esfuerzan por arreglarla. "¡Ustedes no saben manejar!»
El evento reunió aproximadamente $1 millón para los candidatos demócratas al Congreso y el representante demócrata por Boca-Ratón, Ron Klein, a quien Obama le pidió excusas por llamarlo Ron Klain al comienzo de su discurso. Klain es el jefe de personal del vicepresidente Joe Biden.
Obama pronunció dos discursos abiertos a la prensa; Klein no estuvo cerca de él en ninguno de los dos.
Obama apoyó a otro candidato antes de dejar Washington, grabando un anuncio radial en favor de la languideciente campaña de Kendrick Meek por el Senado federal. Obama apremia a sus partidarios para que voten por Meek, señalando: "Si trabajamos unidos, ganará».
La visita de Obama llega una semana antes de que las votaciones adelantadas se inicien el 18 de octubre, y constituye su tercer viaje de recaudación de fondos a Miami este año, mientras se esfuerza por defender las mayorías demócratas en la Cámara y el Senado.
Los republicanos confían en apoderarse de 39 escaños demócratas para tomar la Cámara, y han puesto los ojos en el indeciso puesto ocupado ahora por Klein en Broward/Palm Beach. En el 2006, Klein desbancó al titular republicano, E. Clay Shaw, aprovechando el enojo de los votantes con el presidente George W. Bush y la guerra en Irak.
Ahora el ambiente político ha cambiado, y Allen West, un republicano negro provisto de un fondo de campaña de $4 millones, está aprovechando el disgusto de la gente con la situación económica y el descenso en los niveles de popularidad del presidente.
Obama calificó a Klein como un "fuerte aliado de Israel» y un legislador que ha luchado por obtener sanciones contra Irán. También dijo que Klein se ha ocupado de los propietarios de pequeños negocios en el distrito. Antes del evento, Klein dio a conocer que varios funcionarios republicanos de la ciudad lo apoyaban.
"El conoce a la gente del sur de la Florida; él los ha estado escuchando», dijo Obama,
West envió un correo electrónico el lunes en que critica a Klein por el evento. Comparó el precio de la entrada, de $17,600 por pareja, con el desayuno de $5 que dijo haber compartido con el líder de la minoría republicana de la Cámara, el representante John Boehner, en el Gun Club Cafe de West Palm Beach.
"Uno sabe que su oponente tiene problemas cuando llama a una de las personas más impopulares de Estados Unidos para que lo ayude», afirmó West en una declaración.
Un grupo de unos 20 activistas que piden un rápido fin de la política de ‘No pregunte, no diga» (Don’t Ask, Don’t Tell) de las fuerzas armadas con respecto a los homosexuales, se manifestó contra el evento desde embarcaciones en la Bahía de Biscayne. Se les podía oír desde las carpas en el jardín de Mourning, pero el ruido no fue suficiente para interrumpir el acto.
Las protestas ocurridas en septiembre durante un evento de recaudación en Nueva York, obligaron varias veces a Obama a apartarse de su guión para defender su actuación al respecto.
Después de la cena, Obama y el candidato al congreso Joe García visitaron la cafetería El Mago De Las Fritas, de la Calle Ocho, famosa por su frita cubana con chorizo y papas fritas.
El presidente conversó con un par de comensales, con las mangas de la camisa remangadas, mientras se escuchaba en la radio el último éxito de Enrique Iglesias, "I Like It». Obama pidió cinco fritas y dijo en broma que la primera dama Michelle Obama –que defiende la comida saludable– no debía enterarse de esta visita.
