Cuba.- Durante 2009 la industria turística nacional dejó de ingresar 1.030 millones de dólares por las severas restricciones del gobierno de Estados Unidos sobre los viajes de sus ciudadanos a la isla, como parte de la política de bloqueo económico puesta en marcha hace más de cuatro décadas. Datos de la Asociación Americana de Agencias de Viajes (ASTA) indican que dos años después de retirarse la prohibición llegarían al país caribeño unos 850.000 norteamericanos al año vía aérea, además de medio millón en cruceros, aunque el gobierno cubano estima incluso más de un millón y medio.
Según las autoridades cubanas, si no existiera el bloqueo de Washington a La Habana, el año pasado hubiesen podido viajar a Cuba un estimado de 1.585.000 turistas norteamericanos. La directora de Relaciones Internacionales del Ministerio de Turismo (Mintur), Carmen Casals, explicó a la prensa que las pérdidas se calcularon estimando que el 15% de los 13 millones de turistas estadounidenses que visitan el Caribe viajaría a Cuba de no existir la actual prohibición.
A pesar de las restricciones, y usando tercera países como vía de viaje, en 2009 unos 50.000 estadounidenses de origen no cubano viajaron a la isla caribeña, a lo que se suman unos 300.000 cubanos residentes en el exterior, la mayoría en Estados Unidos, según estadísticas del Mintur.
Según fuentes oficiales, los daños causados por el bloqueo al sector turístico en 2009 ascienden a más de 1.108 millones de dólares, y además de menor flujo turístico también incluyen daños por restricciones en las importaciones, publicidad y servicios de reserva y ventas por internet.
La prohibición de que veleros y yates norteamericanos atraquen en marinas de la isla añade más de 11 millones de dólares de pérdidas a la suma del sector turístico.
En septiembre pasado, el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes de Estados Unidos aplazó indefinidamente el voto sobre esa medida, que podría programarse para la sesión del Congreso prevista para después de los comicios legislativos del próximo 2 de noviembre.
En la actualidad, el Gobierno de Estados Unidos permite los viajes y el envío de remesas a cubanoamericanos que tienen familiares en Cuba (restringidas durante la administración Bush), pero mantiene la prohibición para los estadounidenses y las limitaciones en el intercambio cultural, deportivo, académico y científico entre ambos países.
La Asociación Americana de Agencias de Viajes (ASTA) estima que dos años después de levantarse la prohibición, unos 850.000 norteamericanos llegarían a Cuba a hospedarse en hoteles y medio millón más lo haría en cruceros.
En 2009, Cuba recibió la visita de 2,43 millones de turistas, un 3,5% más que en 2008, reportando unos 2.000 millones de dólares a la economía nacional. Los principales países emisores de visitantes a la isla son hoy Canadá, Italia, Reino Unido, Francia y España.
El reporte de las pérdidas en turismo se incluye en el informe contra el bloqueo que Cuba someterá el 26 de octubre a votación en la Asamblea General de las Naciones Unidas.