Representantes de la iglesia católica reaccionaron este jueves ante la denuncia de que los niños intoxicados con la leche del desayuno escolar podría ser un plan de sabotaje de un sector de los ganaderos del país interesados en los millonarios contratos.
El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez y monseñor Agripino Núñez Collado coincidieron en que la problemática debe ser investigada hasta las últimas consecuencias y que se tomen sanciones drásticas en caso de que se detecte algún culpable.
Mientras que los ganaderos salieron al frente a la denuncia de que encabezan un plan de sabotaje contra el desayuno escolar.
La Asociación de Productores de leche acusaron al Ministerio de Educación de las intoxicaciones por no seguir las recomendaciones que le hiciera la Comisión de Aseguramiento de Calidad del Programa de Alimentación Escolar que denunció graves evidencias de contaminación de la leche.
