Dajabón.-El jefe del Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza Terrestre (CESFRONT), general Julio César Cataing Jiménez, consideró como una exageración la denuncia del padre Regino Martínez, coordinador de Solirdaridad Fronteriza en Dajabón, de que militares que custodian la línea limitrófe dominico-haitiano están cobrando cinco mil pesos por dejar pasar a cada haitiano y que por allí pasa toda clase de sustancias controladas.
El alto oficial castrense reveló que admira mucho al padre Regino y le respeta su opinión, pero que no la comparte.
Para Cataing JIménez, hay sectores que tratan de desmoralizar al Cesfront haciendo denuncias alegres de que el tráfico de personas ha aumentado de manera alarmante después que se establecieron los controles en la frontera para evitar la entrada del cólera al país.
Pero advirtió que lo que se han empeñado en esa tarea pierden su tiempo, porque el Cesfront no se dejará provocar y seguirá haciendo su trabajo con firmeza para controlar las cosas malas que se presentan en esa conflictiva zona.
Al referirse a la denuncia del padre Regino Martínez, coordinador de Solidaridad Fronteriza en Dajabón, en el sentido de que militares que custodian la frontera están cobrando cinco mil pesos por dejar pasar a cada haitiano, declaró que respeta mucho su opinión, pero que no la comparte.
Dijo que admira al padre Martínez, pero que es una lógica que antes de hacer una denuncia de esa naturaleza, debe tener los elementos de pruebas suficientes.
En ese contexto, explicó que diariamente miembros del Cesfront devuelven a decenas de haitianos que son sorprendidos cruzando la frontera.
No obstante, reveló que es posible que hayan algunos que se dejen llevar de la tentación del dinero, pero que de ser así es una mínoría.
Sostuvo que los soldados bajo su mano que se vean envueltos en actos violatorios a la ley y los principios de las Fuerzas Arnadas, serán debidamente sancionados.
Cataing JIménez expresó que pese a esas denuncias, el Cesfront sigue trabajando con más firmenza para enfrentar a los traficantes de personas, contrabandistas y otros males que se presentan en la zona.
Organizaciones de la frontera y el padre Regino Martínez, denunciaron que el tráfico de haitianos ha aumentado de manera sigbnificativa después de los controles que establecieron las autoridades para evitar la entrada del cólera al país.
El padre Martínez denunció el pasado martes que los militares responsables de vigilar la frontera están cobrando cinco mil pesos por dejar pasar a cada haitiano y que por ahi pasa todo tipo de sustancias controladas.
