El acuerdo Petrocaribe nos permite solo pagar 50 dólares del precio de mercado alcanzado por el barril de petróleo, la otra parte se difiere como un préstamo a 25 años, ¿Quiénes lo pagarán.
Si el gobierno utilizará el acuerdo para beneficiar al pueblo dominicano en su conjunto, dijera: miren, el precio actual del petróleo es de 88 dólares el barril, pero nosotros solo le pagamos a Venezuela 50 dólares, entonces fijaremos los precios en base a eso, y la diferencia, un préstamo obligado a pagar en 25 años, ese dinero ustedes lo utilizaran para educar a sus hijos porque serán ellos quienes tendrán que pagar el prestamos tomado ahora.
Pero el gobierno usa ese dinero para su perversa campaña reeleccionista. Y hoy, aunque las mayorías de las dependencias estatales carecen de recursos para cumplir sus obligaciones, el Presidente anda repartiendo gorras y sobres con los que se pretende comprar la fidelidad política.
Bueno, pero el caso es que nuestro consumo de petróleo debe andar por los 140 mil barriles diario y el precio actual del barril supera los 80 dólares. Para no complicarles las neuronas a quienes se les hace difícil bregar con números, utilizaremos dos cantidades fijas.
Asumamos como consumo diario 100 mil barriles y como precio 70 dólares. Asumo 70 porque ese es un precio adorado por el Presidente Venezolano Hugo Chávez y lo necesitamos como aliado.
Siendo así, por cada barril de petróleo el gobierno se está quedando con 20 dólares, como hemos asumido un consumo de 100 mil barriles, tenemos un préstamo diario de 2 millones de dólares. Ese préstamo al ser multiplicado por 365 días arroja un monto anual de 730 millones de dólares. Al multiplicarlo por la tasa de cambio, es decir, 36, tenemos unos 26 mil doscientos 80 millones de pesos.
De acuerdo con nuestro PBI, el 4% serian 67 mil millones de pesos que deberíamos presupuestal al Ministerio de Educación, pero solo le entregaremos unos 40 mil millones. Si sumamos los 26 millones de Petrocaribe ahí están los recursos para invertir en Educación.
Y será una inversión adecuada porque quienes se eduquen hoy tendrán que pagar los préstamos de Petrocaribe.
El gobierno podrá alegar cualquier excusa, menos el que no hay recursos. Cada vez que un dominicano consume combustibles está inmediatamente pagando el préstamo, pues el precio cobrado no es de 50 dólares sino el precio del actual valor del mercado. Es decir, pagamos el préstamo ahora y después tendremos que pagarlo en 25 años.
Como el gobierno está dilapidando estos recursos ni nos beneficiamos las generaciones actuales ni se beneficiaran las generaciones del futuro. El dinero de Petrocaribe tiene que ir a educación y le pido al genial movimiento Amarillo que contacten al Presidente Hugo Chávez para que esto pueda ser una realidad. Cuenten conmigo.