Si la reelección presidencial es un proyecto que no puede imponerse ni con votos ni con botas, ¿por qué los gatos palaciegos los agitan? ¿A quién quieren hacerle daño? ¿A quién quieren obligar a negociar desde una posición de fuerza?
Hace unos días fui a recortarme el pelo de la cabeza y en la barbería había siete personas, seis de los cuales se sentían emocionalmente satisfechos si Danilo Medina alcanza la presidencia de la República, pero los siete de ellos están absolutamente seguro de que Leonel Fernández no lo dejará pasar.
Como Palacio sabe, conoce en gráficos numéricos los apetitos emocionales de nuestro electorado, ha decidido jugar a ello. La razón por la cual agitan la campaña reeleccionista es para afianzar en el electorado la idea de que Leonel no permitirá que otro peledeístas alcance la presidencia de la República.
Uno puede llegar a pensar de que hay un plan especifico para aplastar a Danilo Medina, pero no se trata de eso: en la mente de los gatos reeleccionistas está fijado como elemento básico de su accionar, aplastar a cualquiera que intente sacar cabeza.
Danilo es el más golpeado porque es el que tiene la cabeza más alta dentro del electorado nacional. Y Palacio no le perdona el que tenga 10 puntos por encima del Presidente de la República. La popularidad de Danilo sigue creciendo, pero con la campaña reeleccionista crece aun más la percepción de que Leonel no lo dejará pasar.
Ese es el tipo de perversidad que Félix Bautista y Freddy Pérez están viviendo. Quieren hacerle saber al posible candidato presidencial del PLD que ellos no tienen nada que aportarle al triunfo, pero si mucho a su derrota.
Yo no sé hasta dónde puede llegar la cobardía de los seres humanos, pero me aterra saber que el Comité Político y el Comité Central del PLD les tengan miedo a Leonel Fernández, Félix Bautista y Freddy Pérez. Si los organismos peledeístas permiten la campaña reeleccionista habrán condenado a la derrota al candidato Presidencial del PLD, no importa quién sea.