MELBOURNE, Australia. Para medir la gigantesca brecha que separa a Rafael Nadal y Roger Federer de los demás en el tenis masculino, pues nada más hay que tomarle el pulso a Marcos Daniel.
En el Abierto de Australia el martes, Daniel tuvo el desafortunado turno de enfrentar a Nadal, quien ha venido para ganar su cuarto título de Grand Slam consecutivo, el "Rafa Slam".
El brasileño Daniel pudo admirar, si bien brevemente, la formidable clase de Nadal.
Apenas fue un rato, ya que la rodilla izquierda de Daniel le traicionó, retirándose del partido de primera ronda en el que iba perdiendo 6-0, 5-0. Sólo habían pasado 47 minutos.
"Si te pones a ver a los cinco primeros, siguen superándose constantemente", dijo Daniel. "Están un escalón arriba, son más rápidos y le pegan más fuerte que los demás, están muy concentrados durante cuatro horas. Es tanta la diferencia".
Nalbandian protagonizó un sensacional partido de cinco sets frente al ídolo local Lleyton Hewitt, un viejo rival que en este torneo le había ganado en otro maratón pero por cuartos de final. El argentino salió triunfante esta vez con parciales 3-6, 6-4, 3-6, 7-6 (1), 9-7 y ahora chocará con el lituano Richard Berankis.
OTROS PARTIDOS. El británico Murray, quinto preclasificado, avanzó a la siguiente ronda tras retirarse el eslovaco Karol Beck por una lesión en el hombro en el tercer set. Murray, el único en vencer a Nadal en un torneo del Grand Slam el año pasado, ganaba 6-3, 6-1, 4-2 cuando Beck no pudo continuar. Igual de fácil fue el triunfo del sueco Robin Soderling (4) ante el italiano Potito Starace por 6-4, 6-2, 6-2.
Del Potro muestra cierta recuperación
Juan Martín del Potro venció 7-6 (13), 6-4, 6-4 al israelí Dudi Sela, una victoria que celebró. Gritó a todo pulmón y miró al cielo agradecido tras un esfuerzo en el que exhibió toda la potencia de su forehand, pero con una lenta movilidad que evidenció su prolongada falta de actividad.
