Santiago.-Productores agrícolas del Noroeste dijeron este jueves que están confrontando muchas dificultades con la mano de obra, debido a que los haitianos no quieren trabajar en las fincas y muchos de ellos prefieren desplazarse a ciudades como Santiago, Mao, Puerto Plata, la Vega, la capital y otras donde se dedican a actividades diversas.
A este respecto, el presidente de la Asociación de Productores de Arroz del Noroeste, Rafael Díaz, dijo que los haitianos ya no quieren trabajar en el campo, porque se están dedicando a motoconchar, rifar, vender en las calles, la construcción y otras actividades económicas.
Subrayó que otros sin embargo, dejan las fincas para pernoctar las calles de las ciudades sin hacer nada.
“Yo mismo me he sorprendido porque he visto a muchos haitianos que antes trabajaban en mi finca arrocera caminar las calles de Mao y cuando le digo que vuelvan, me dicen que el trabajo en el campo es muy duro, no quieren trabajar están viviendo como turistas”, se quejó.
Asimismo, declaró que decenas de productores han sido sometidos a la Justicia por haitianos indocumentados con la orientación de abogados por supuesta violación a las leyes laborales.
Según Díaz, hay productores que necesitan mano de obra y que contratan en sus fincas a haitianos ilegales por una ó dos semanas, pero que cuando no los necesitan los suspenden hasta nuevo aviso pagándole todos sus jornales por el tiempo que laboraron.
No obstante, señala que muchos de ellos recurren a abogados que los orientan para que demanden a los productores y ganaderos diciendo que tenían entre dos, tres y cinco años laborando.
Se quejó porque casi siempre los pleitos los ganan los haitianos pese a que son indocumentados y hay testimonios que revelan que sólo trabajaron con ellos una ó dos semanas.
Rafael Díaz sostuvo que ese es otro factor que está afectando la mano de obra, porque los productores están siendo cautelosos a la hora de contratar haitianos ilegales, aunque observó que por necesidad tienen que recurrir a los pocos que trabajan en el campo.
Una fuente de Migración en la zona norte confirmó que muchos haitianos a los que se les ha dotado de carnet para trabajar en las fincas, desertan de inmediato y se desplazan a ciudades como Santiago, Mao, la Vega, San Francisco de Macorís y Puerto Plata, donde se dedican a diferentes actividades económicas.