No hay que ser especialista en el tema para comprender que la República Dominicana consume cada vez más petróleo, mientras más cuesta. El precio se eleva ya a más de 10 dólares el barril en los últimos días y en términos de implicaciones económicas la pregunta es ¿qué sucederá si los asuntos en el Medio Oriente y sobre todo en Libia siguen complicándose?
Amén de la preocupación por la suerte que correrá la población y el peligro de guerras civiles, otras inquietudes pesan en la realidad de cuánto podrán desestabilizarse más los precios del petróleo y de qué manera responderán economías como la dominicana, con ausencia de una política de ahorro, donde ni administraciones o sectores públicos y mucho menos los privados poseen dicha cultura.
Los privilegios de importaciones de vehículos para determinados funcionarios se suman a un mayor consumo de combustibles, con las consiguientes prerrogativas de quienes gastan sin que el Estado dominicano asuma las medidas que requiere tal situación, a la que se añade la ausencia de normas que transformen las condiciones de transporte masivo de pasajeros, con un mayor empleo de gas natural en vez de los costosos derivados del petróleo.
De manera que la dependencia del parque energético del preciado líquido se traduce en el territorio nacional en gran consumo y altos costos de la factura petrolera, siendo este un país que no produce petróleo, se coloca a la nación en posición de mayor desventaja ante una Venezuela que ha viabilizado los servicios de PetroCaribe con facilidades extraordinarias…Pero reiteramos:
¿cuánto más podrán incrementarse los precios de acuerdo a las circunstancias y los tiempos que vive el Medio Oriente? ¿Cuál será el destino de República Dominicana, sin medidas preventivas de ahorro y conductas paliativas ante esta realidad?
¿Interpretaciones alarmistas? No, somos un país pobre que piensa como rico, con recursos exiguos que algunos, sobre todo quienes tienen en sus manos las posibilidades de exigir regulaciones e imponer ahorros, derrochan y no piensan que pueden llegar días como estos…