Número 9
Al margen de los avances sucesivos que se venían produciendo en el área de las Telecomunicaciones del sector privado, como producto de la gran competencia que se suscitó entre las empresas, el gobierno dominicano decidió mejorar su oferta de servicios, a partir del año 1982, cuando mediante un acuerdo con el gobierno Japonés, adquirió el sistema Rural de Telecomunicaciones, abarcando todo el territorio nacional.
Para entonces, este novedoso sistema de Telecomunicaciones consistió en la instalación de una poderosa central FEDEX 100, instalada en la sede principal de la Dirección General de Telecomunicaciones, con repetidoras en las principales regiones del país y el establecimiento de poderos teléfonos digitales que sustituyeron los aparatos de discos en todas las provincias y los municipios de la República Dominicana.
El trabajo de instalación, de lo que fue hasta ese momento el salto más gigantesco dado por el Estado dominicano en materia de la oferta de servicios de Telecomunicaciones a la ciudadanía, fue dirigido por una misión de técnicos designada por el gobierno del Japón con la finalidad de que entrenaran e instruyeran a los técnicos dominicanos en el manejo y operación de los equipos.
En ese sentido, la Misión de Técnicos Japonesa duró varios años en la República Dominicana, mucho después de que el nuevo sistema de Telecomunicaciones iniciara sus operaciones, aunque no en la misma cantidad de los profesionales que fueron enviados por el gobierno de ese país, a principios del acuerdo.
Una vez que fueron entrenados los técnicos dominicanos en el manejo y operación de la Central Telefónica y los Teletipos que fueron instalados en las oficinas de la DGT en todo el territorio nacional, el gobierno dominicano asumió el control operativo del sistema, designando al frente del mismo a la ingeniera Luz Decena Castro, quien permaneció en esas funciones hasta que esa institución fue convertida en el órgano regulador que es hoy el INDOTEL.
No obstante los técnicos criollos haber aprendido rápidamente las enseñanzas de sus colegas japoneses, la Misión de ese país, continuó operando en la República Dominicana, ya que la misma también tenía el compromiso de realizar las mismas tareas con las autoridades y técnicos de Radio Televisión Dominicana, lo que es hoy CERTV, debido a que también le fueron donados equipos sofisticados para modernizar las transmisiones del canal Estatal.
En el momento en que la DGT recibió los equipos para la instalación de la moderna Red Rural de Telecomunicaciones, se encontraba al frente de esa institución, el señor Rafael Peguero Calzada, quien previamente había sido director de Radio Televisión Dominicana y era considerado como un técnico del sector de las telecomunicaciones del país.
A pesar de los cambios de gobierno que se suscitaron, las autoridades que fueron designadas por los presidentes Joaquín Balaguer, durante sus últimos diez años y luego el primer gobierno del presidente Leonel Fernández, los técnicos que tenían que ver con las operaciones del Sistema Rural de Telecomunicaciones fueron preservados, pero cuando se produjo el cambio de la DGT a órgano regulador la mayoría de ellos fueron barridos y muy pocos permanecieron en el INDOTEL.
Durante ese proceso, vale la pena destacar las gestiones que encabezaron en la Dirección General de Telecomunicaciones, el vicealmirante retirado de la Marina de Guerra, Ramón Adolfo Soto Then, el licenciado Leopoldo Núñez Santos y Rubén Montás, quienes lograron mantener y preservar el Sistema Rural de Telecomunicaciones hasta su parte final, brindando servicios de Telecomunicaciones nacionales e internacional a precios muy por debajo de los que ofrecían las empresas privadas del área.
Nota: En el próximo artículo no se pierdan lo relativo a las empresas privadas de Telecomunicaciones y su aporte al país.
