Palabras que acusan (II)

En otro de los momentos del Sermón de las Siete Palabras, uno de los sacerdotes Bienvenido recordó a esas mayorías que se sienten explotadas, “abusada e impotente para remediar su situación y que está sedienta de que se haga justicia”.

De la necesidad de paz, armonía, humanización hablaron los religiosos, frente a un mundo cada vez más “violento y agresivo y que parece deshumanizarse y amenaza con imperar la ley del más fuerte”.

Cada día, en la nación dominicana, los políticos hablan de las cercanas elecciones y la posibilidad de que un partido u otro adquiera el poder.
Ejemplos miles se multiplican de quienes “negocian” cuánto les tocará en “el pastel” una vez escalados los eslabones del Gobierno, con esa sed insaciable de dinero, “siendo capaces inclusive de renunciar a la honestidad a su dignidad, traicionando su propia conciencia”.

La pregunta sigue siendo, ¿cuándo habrá políticos que aspiren al poder para desafiar las intolerancias de un sistema pleno de inequidad y de carencias, que dispongan hasta de sus propios bienes para solucionar los problemas de educación, salud y seguridad social que abaten a la República Dominicana?

¿Utopías? Según el premio Cervantes 2007, Juan Gelman: “La utopía es un país que el ser humano visita todas las noches". Ese parece ser inconfundible camino que transitan dominicanas y dominicanos cada día, mientras, como aseguraron los religiosos en este Sermón de las Siete Palabras, repiten día a día: “Padre en tus manos encomiendo mi espíritu”.

Compartir esta publicación:

WhatsApp
Facebook
X
LinkedIn
Pinterest

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *