Los Ángeles.- Las hispanas que en meses previos a un embarazo, y durante la etapa de gestación, sufren violencia doméstica tienen más probabilidades de desarrollar depresión posparto, según un estudio de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA).
"La violencia doméstica durante el embarazo es un factor de riesgo para la depresión posparto en mujeres latinas, mucho más que en los casos en que sufren depresión (como enfermedad)", dijo a Efe Michael Rodríguez, médico y profesor de la escuela de medicina David Geffen de UCLA.
Según el investigador, la violencia doméstica afecta el desarrollo de los niños y la depresión de las madres.
"Los efectos se ven en señales de depresión en los infantes que posteriormente les afecta su capacidad de estudiar y tienen más probabilidades de complicaciones con enfermedades crónicas como el asma o la diabetes", aseguró.
El estudio titulado Proyecto Cuna, financiado por el Instituto de Salud Mental Nacional a un costo de 2 millones de dólares, fue dirigido entre 2003 a 2008 por Rodríguez junto a sus colegas de UCLA Jeanette M. Valentine, Lisa M. Lapeyrouse y Muyu Zhang.
"La violencia doméstica en la etapa previa y posterior al embarazo es algo que no se ha estudiado tanto en la comunidad latina", explicó Rodríguez.
"Por eso los médicos cuando estamos dando servicios prenatales a mujeres latinas debemos de preguntar si tienen un historial de depresión o si están viviendo en una situación de violencia doméstica", añadió.
El Proyecto Cuna fue desarrollado sobre la base de entrevistas a 210 hispanas mayores de 18 años, en clínicas de Los Ángeles, que fueron invitadas a participar en la investigación de UCLA orientada a medir el impacto de la violencia física, sexual o sicológica en un año previo al embarazo y otro año posterior al parto.
Los médicos de diversas especialidades encontraron que entre el segmento de hispanas "las que experimentaron Violencia de Compañeros Íntimos (IPV por su sigla en inglés) dentro de los 12 meses antes del embarazo estaban predispuestas a sufrir 5,4 veces más depresión posparto a diferencia de las mujeres que no habían experimentado IPV".
"La violencia doméstica se encuentra en todas las comunidades, no importa la raza, grupo étnico o el idioma; pero donde existe a nivel más alto es en las comunidades con más bajos ingresos", señaló Rodríguez.
"Esa violencia es más grande entre los latinos porque es la población con más bajos ingresos en comparación con otros grupos étnicos, es por esa razón, no por ser latinos en sí", aclaró el investigador.
El estudio indica además que de las 210 voluntarias en el 33,2 por ciento fue detectada depresión antes de dar a luz; el 43,7 reunían los criterios para ser diagnosticadas con depresión durante el primer año después de haber nacido su bebé y el 20,5 por ciento experimentó IPV antes de los 12 meses previos al embarazo.