Las negociaciones de Derek Jeter con los Yankees de Nueva York en el invierno pasado parece que fueron el Round 1 entre la laureada generación de viejos peloteros del equipo y la gerencia. El episodio de Jorge Posada en el fin de semana fue el Round 2.
Y ahora parece que viene un Round 3 en las próximas horas y días por delante, luego que Jeter practicamente exonerara a Posada de haber hecho algo malo, en sus declaraciones a los reporteros. De acuerdo con varias fuentes, la gerencia del equipo se sorprendió y se frustró por lo que dijo Jeter — particularmente por su posición como capitán — incluso luego que el mismo Posada reconociera que falló en sus acciones el sábado y se disculpara con el manager Joe Girardi el domingo.
Posada, quien está teniendo problemas en el plato, fue bajado al noveno puesto en la alineación para el juego del sábado, y pidió ser sacado del mismo, alegando posteriormente que sintió que le habían faltado el respeto.
Jeter, quien es amigo cercano de Posada, y quien describiera el domingo al ex receptor boricua como casi un hermano, evitó contestar repetidamente las preguntas sobre las acciones de Posada, y dijo que no veía razón para que se disculpara ante sus compañeros, luego de no querer jugar el sábado. La oficina central del equipo estaba tan molesta con las acciones de Posada que incluso llegaron a considerar darle su libertad inmediata.
Jeter tuvo un análisis diferente del asunto. «Si yo hubiese pensado que él hizo algo malo, habría sido el primero en decirselo,» dijo Jeter en medio de una larga sesión con los reporteros el domingo.
Jeter enfrenta alto mando Yankees por Jorge Posada
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