Recientemente llegó a mis manos un libro de la autoría del Lic. Luis Julián Pérez, que circuló a finales de la era de los doce años de gobierno que protagonizó el Dr. Joaquín Balaguer, esta obra se titula: «La Democracia Nuestra» (testimonio) y en ella el abogado y político trata de retratar lo que a su juicio era el gobierno reformista ya en el ocaso.
En esta obra, el tiempo, juez inexorable de la historia, parece haberse detenido, y es que treinta y tres años después, su contenido parece que fue escrito hoy, sus recomendaciones y críticas al gobierno de ayer se entendería que fueron dictadas para el presente gobierno peledeísta que ya agoniza, este párrafo es un ejemplo: «Indudablemente el Gobierno actual y sus privilegiados están asustados. Están temerosos porque ya se les acaba el festival. Su poder y sus fuentes inagotables de riquezas están a punto de desaparecer. Parece que se acaba su ostentación y dilapidación irritante para todos los demás dominicanos. El pueblo así lo ha decidido y solo espera la ocasión para darle un repudio público.»
Y a seguidas continua señalando: «cuánto daño han hecho; hasta a sus propios correligionarios. La mayoría de estos los miran con desconfianza y prevención, porque casi todos ellos han caído victimas de sus ambiciones y de las tropelías del grupo que ha sacado ventajas de todo género de estos doce años. El desorden administrativo y financiero constituye la característica más destacada de este gobierno, tenemos que declararle una lucha sin cuartel a la corrupción que en el campea».
Ante todo esto que hemos citado, ciertamente no sabríamos si el Lic. Luis Julián Pérez se refiere al gobierno de Balaguer o al de Leonel, o si sería esto una premonición del autor , en el sentido de lo que a diario se repite de que Leonel es el discípulo más aventajado de Balaguer, distanciándose cada vez mas de sus orígenes. La realidad que vive hoy el pueblo español debe llevarnos a la más profunda de las reflexiones, un pueblo inconforme decidió manifestarse tomando como único guía la obra ‘Indignaos’ del Francés Stephane Henssel para exigirle a los políticos y al gobierno un cambio de rumbo.
En nuestro país, en esta democracia nuestra, si en las próximas elecciones no se origina un cambio verdadero donde se reoriente la conducción del Estado a favor de las grandes mayorías, si el PLD insiste en seguir contra viento y marea en el gobierno, las calles y las plazas serán el camino a seguir. La insatisfacción del pueblo dominicano hoy día se refleja en todas las encuestas que se han publicado; el pueblo está esperando paciente hasta mayo del próximo año.