El desconcierto es denominador común entre los abogados y las personas que a diario acuden al Palacio de Justicia de la Provincia Santo Domingo, donde se maneja cerca del 35% de los casos judiciales de todo el país debido a la densidad poblacional existente. Unido a esto, las pocas facilidades que ofrece la edificación constituye, a juicio de los usuarios, la principal dificultad que a diario enfrentan para buscar servicios o ejecutar su profesión.
El sitio donde funciona esta jurisdicción judicial correspondía a una ferretería, según algunos: Otros mencionan que era un hotel de paso, cuya estructura fue adatada para operar el Palacio de Justicia y las oficinas de la Fiscalía. Las salas de audiencias son extremadamente pequeñas, unos 20 metros cuadrados y el tribunal de Atención Permanente funciona en un furgón, espacio de apenas dos metros cuadrados. Tampoco cuentan con baños apropiados y los que existen sólo tienen capacidad para una persona, lo que obliga a hacer filas para cualquier necesidad fisiológica.
Los abogados que allí ejercen consideran que en las salas no hay condiciones, ni están apropiadas para desarrollar audiencias, porque los espacios son muy pequeños. Según los juristas, se requiere de espacio más amplio para que, tantos los abogados como los jueces, puedan ejercer su profesión con dignidad y tener garantías de su trabajo.
Narran que existen casos de presos que han agredido a personas porque deben caminar muy cerca de los familiares de los agraviados. Es una situación que se ve con frecuencia. Describen, además, como deprimente la celebración de audiencias en el tribunal de Atención Permanente, porque los abogados, militares y prevenidos deben estar todos juntos en el pequeño espacio habilitado en un furgón ubicado en el patio del recinto.
A veces se restringe hasta la entrada de los abogados, pese a que los presos siempre deben tener cerca su defensa para consultar sobre el proceso.Otra situación desorganizada se observa en el segundo nivel de de la edificación, donde se habilitaron cuatro salas, dos penales, una corte y el tribunal de Ejecución de la Pena, en otro espacio funciona una secretaría común para todos los tribunales.
Lo más desesperante es buscar algún servicio a través de secretaría, puesto que la solicitud de cualquier información puede tomar todo un día. Para accesder a dichas atenciones, primero se debe tomar un turno y esperar pacientemente a que le atiendan.
Otra situación apremiante es la tardanza en la entrega de los documentos, puesto que los abogados deben pasar hasta un día para conseguir copia de una sentencia. El espacio dispuesto para los abogados y familiares de los imputados y querellantes, es también sumamente pequeño y no cuenta con ninguna facilidad para acoger personas en el lugar, puesto que ni siquiera posee asientos.
En el segundo nivel, también fue instalada una computadora que opera como un asistente judicial, donde los abogados y otros interesados consultan sobre el estatus de su expediente. Asimismo, en el tercer nivel funcionan dos tribunales colegiados y dos de la instrucción.
Pese a la poca facilidad para la ejecución de su trabajo, los juristas sostienen que las audiencias se desarrollan de forma correcta, pero que por la falta de espacio los familiares no pueden comparecer en estas. Se quejan de que los tribunales deben tener mayor control en dicha conducción , así como mayor seguridad porque a veces los militares se ausentan.
Argumentan que urge mejorar los espacios y construir un Palacio de Justicia que este acorde con la realidad de los nuevos tiempos y que más allá de la estructura lo que importa es la operatividad del sistema, el cual no se puede permitir que colapse pese a las limitaciones que se observan.
