La Asociación de Historiadores Latinoamericanos y del Caribe (ADHILAC), decidió por unanimidad otorgar al destacado historiador dominicano Emilio Cordero Michel, la condición de miembro de honor de dicha organización, como tributo a su destacada trayectoria de toda la vida dedicada a la investigación historiográfica y la enseñanza de la historia en República Dominicana.
Lo anterior devino acuerdo de la ADHILAC al concluir su X Congreso Internacional, llevado a cabo en el país durante los días 14 al 17 de junio y en cuya cita se reunieron más de 300 participantes: historiadores, docentes, alumnos e investigadores en general de todos los países de América Latina y el Caribe, Norteamérica, Asia y Europa.
Emilio Cordero Michel es considerado una de las más importantes y valiosas figuras de la historiografía dominicana; gloria, no sólo de esta nación, sino de todo el continente, cuya obra es valorada y consultada por especialistas de las Ciencias Sociales debido a su profundidad, nivel de reflexión y análisis.
Para DominicanosHoy.com fue un verdadero honor conversar con el jovial octogenario a pocas horas de recibir tan alta calificación. El veterano profesor, insigne académico, pedagogo eterno, consumado investigador y gran ser humano, no dudó en ofrecer su verbo sencillo, sagaz, preciso y a veces cáustico.
Explicó que en estos momentos se encuentra inmerso en la compilación de su propia obra y que debió abandonar la docencia hace varios años, por problemas de las cuerdas vocales.
“Me he dedicado a la investigación”, aseveró quien fuera vicepresidente y luego presidente de la Academia de la Historia Dominicana (ADH), hasta agosto pasado y ahora se dedica a agrupar todo lo que ha publicado desde 1959 hasta la fecha.
Entre la prolífera obra de Cordero Michel se encuentra la estructura agraria dominicana e inapreciables ensayos sobre la era trujillista. La prensa nacional lo ha considerado durante muchas décadas “figura emblemática dentro del ámbito de la historiografía dominicana, no sólo por la calidad de sus escritos, sino por la reciedumbre de su carácter, sus firmes posiciones ideológicas, sensibilidad social, capacidad para provocar positivas polémicas y de expresar opiniones sin acomodarlas a requerimientos grupales ni a intereses mezquinos; pero, sobre todo, por su integridad como ser humano, rigor académico y disciplina intelectual”.
-Usted ha dicho que las Ciencias Sociales son como la hija adúltera de las políticas gubernamentales en el país…
“Sí, es que aquí no existen políticas destinadas a la investigación, sobre todo en las Ciencias Sociales. Por eso la considero como la hija adúltera. Quizás las haya para la Medicina, la Agricultura, pero no para esas importantes ciencias. En el país, los investigadores han hecho todo con su peculio y voluntad; ningún gobierno se ha preocupado por esto. Ahora mismo vas al Archivo de la Nación y ves personas buscando informaciones en los periódicos, trabajos que les piden los profesores. “Hay algunos investigadores, pero esta labor es casi nula y no por falta de deseos, sino por carencia de recursos, porque no se paga y el investigador tiene que vivir y buscar recursos para mantener a su familia”.
-¿Entonces, profesor, cómo ve el desarrollo de la historiografía en República Dominicana?
“La mayoría de los historiadores dominicanos tiene multiempleo, con salarios muy bajos; por lo tanto, no tienen tiempo para investigar, que requiere de tranquilidad y paciencia. Como le dije, la veo mal”.
-Pero, en la historiografía tradicional dominicana se ha hecho común escuchar nombres como el suyo, el de Roberto Cassá y otros que a pesar de todo trabajan para dejar a la nación importantes obras…
“Sí, hacemos todo lo posible. Ahora mismo trabajo en la revista CLIO y soy el responsable del capítulo tercero de un proyecto de historia del pueblo dominicano que se elabora hace algunos años, donde laboran intelectuales de República Dominicana y extranjeros. También sintetizo y reviso decenas de capítulos de esa obra”.
Concretar ese proyecto de historia del pueblo dominicano es en estos momentos uno de los principales empeños de este maestro de historiadores: “Ya tenemos dos tomos que están en proceso de búsquedas de fotografías, recuadros…”
-¿Pero, extraña la docencia?
“Sí, aunque recientemente impartí un curso. Si me dieran facilidades de acuerdo a mis limitaciones vocales, etc., volvería a impartir clases…”.
Entre las muchas investigaciones y publicaciones de Emilio Cordero Michel están: Datos sobre la Reforma Agraria en República Dominicana 1940-1950; La economía precolonial de la isla La Española y la economía colonial de la isla La Española; El Máximo Gómez desconocido, entre otros.
Como han definido en otros momentos su difícil oficio “de relatar el pasado, únicamente comprometido con la verdad, pero comprometido con los sin voces y sin fortuna”, Cordero Michel oxigena su dignidad, nos despide con grandiosa sencillez y mientras ocupa una silla entre los participantes en el X Congreso Internacional de ADHILAC, como uno más entre el gran público, alguien señala discretamente su presencia, y advierte al fotógrafo de DominicanosHoy.com, que no deje de captar con su lente al gran investigador, el mismo que con imperturbable “dignidad ha mantenido su postura en medio de las tormentas políticas, sociales y económicas que han azotado al país” y que en breve sería galardonado con el más alto galardón de los historiadores de América Latina y el Caribe.
Designan “Miembro de Honor de ADHILAC” historiador dominicano
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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