El argentino Sergio «Maravilla» Martínez (47-2-2, 26 ko), campeón emérito del Consejo Mundial de Boxeo, le exigió al organismo que desconozca al mexicano Julio César Chávez Junior (43-0-1, 30 ko) como monarca regular mediano, si rehúsa confrontarlo en los primeros meses de 2012.
Por lo pronto, el quilmeño está entrenándose para medirse con el invicto británico Darren Barker (23-0-0, 14 ko) el primero de octubre en el Boardwalk Hall de Atlantic City, por el cinturón de diamantes, pero ya piensa en «recuperar el título de los medianos».
Martínez se había adueñado legítimamente de ese cetro en el mismo escenario el 17 de abril de 2010, al vencer al estadounidense Kelly Pavlik por puntos. Sin embargo, la entidad con sede en Ciudad de México lo distinguió como campeón emérito, su antigua corona quedó vacante y poco después llegó a las manos del hijo del gran boxeador azteca.
«Tengo en mente noquear a Barker antes de seis rounds para quitarlo del medio y enfocarme plenamente en recuperar el título de los medianos. Me dijeron que Chávez tiene derecho a una defensa y luego, la obligatoria conmigo», apuntó el bonaerense en diálogo con el sitio de Internet Récord, especializado en boxeo.
Y concluyó: «Su obligación es enfrentarse a los mejores, pero no estoy tan seguro de que quiera la pelea».