UNICEF lo propuso como parte de la celebración de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, junto a otros aliados “para exhortar a que el mensaje sobre los beneficios del amamantamiento se difunda más allá de las clínicas y las salas de parto”.
En realidad, resulta imprescindible llevar este mensaje a todos y todas, en parte por los grandes aportes que recibe la criatura recién nacida y, además, porque no se ha dicho todo sobre esa relación intensa que logran establecer madres e hijos con esta acción, cuya importancia trasciende al alumbramiento y se mantiene de por vida.
Pese a que existe una relación directa entre la lactancia materna y la reducción de la tasa de mortalidad de los niños menores de cinco años, en el país sólo el 7,8% de los lactantes menores de seis meses son amamantados de manera exclusiva.
“Se declara como prioridad nacional la promoción, enseñanza y difusión de la práctica de la lactancia materna, por ser ésta indispensable para garantizar un sano desarrollo y crecimiento de los niños y niñas, quienes reciben de su madre no sólo los nutrientes necesarios, sino también protección inmunológica y apoyo socio- afectivo”, resalta en su artículo primero la Ley 8-95.
A tenor con todo lo anterior, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), presentó la estrategia de comunicación social: “La lactancia materna: lo mejor para asegurar la vida de tu bebé”.
Se trata de incrementar el nivel de conciencia en la población sobre la importancia y los beneficios de la leche materna, tanto para el bebé, como para la madre. Ojalá trasciendan tantos buenos propósitos…