Como los largos “culebrones” o telenovelas que el público sigue paso a paso, al parecer concluyó el show o juicio que implicaba, entre otros acusados, a la amante del capo boricua José David Figueroa Agosto, Sobeida Félix Morel, quien fue condenada a cinco años de prisión y una multa equivalente a 50 salarios mínimos del sector público. Y para nadie queda duda de cuán favorecida fue esta condena, de la cual algunos repiten que su caso “terminó por ser el de Mary Peláez”.
Una lectora emitió una opinión que vale la pena reflejar en estas líneas: “Es increíble como la Justicia Dominicana demostró en este caso que no es independiente al gobierno y que este caso fue totalmente manipulado. Primera vez en la historia del mundo que se negocia para darle más condena a los menos implicados. Siempre las negociaciones son para meter a gente de arriba no a los que están por debajo, lo que pasa es que si involucran a los de arriba nos quedamos sin militares y sin gobierno… qué pena da todo esto”.
Si se tiene en cuenta la fuerza del narcotráfico en el mundo que nos rodea y la manera en que esos fuertes tentáculos han penetrado hasta lo más profundo de la sociedad dominicana, no son precisamente los vendedores de carros y relojes quienes merecen mayor condena, sino quienes han convertido al país en un sitio de actos de sicariato, crímenes antes nunca vistos y todo cuanto caracteriza a la narco- mafia.
Si se esperaba un juicio ejemplar de los encausados en el caso de Figueroa Agosto, realmente hay que decir que el telón bajó sin cumplir expectativas…Y lo peor es que el tráfico sigue y con esa fuerza y más.
