La Junta Central Electoral (JCE), atraviesa por una de sus peores crisis en décadas, luego de la renuncia “forzada” del administrador general de Informática, Miguel Ángel García, producto de un “plan perverso” orquestado por el presidente del organismo, Roberto Rosario, con la finalidad de crear un sistema de cómputos paralelo al existente.
En este sentido, el juez titular de la JCE, Eddy Olivares, expresó su temor a que en el tribunal comicial triunfe un plan perverso como el que concluyó con la renuncia del funcionario de Informática, para colocar en su lugar al director de Informática Franklin Frías.
Señaló que al propiciar la renuncia de García se le ha dado un rudo golpe a la credibilidad del departamento de informática y por consecuencia a la propia JCE a 8 meses de las elecciones presidenciales.
Ante tal situación, Olivares hizo un llamado a los presidentes de los partidos políticos, al mandatario Leonel Fernández, presidente del Senado, Reynaldo Pared Pérez, a los secretarios generales de las instituciones partidarias y a la población en general, para que busquen una solución a la profunda crisis que amenaza a la Junta.
“Se trata de un problema creado para sacar a un hombre que está por encima de los colores políticos y una persona que goza de la confianza de todos los sectores de la sociedad por su reciedumbre moral y su capacidad excepcional, para poner en su lugar a una persona que carece de credibilidad, razón por la que pido que nos unamos”, manifestó el juez.
Olivares sostuvo que García fue víctima de lo que en el mundo anglosajón se conoce como “Mowing”, una especie de acoso laboral en el que se maneja psicológicamente al funcionario con el propósito de que se sienta forzado a renunciar, ante el acorralamiento en el que participa el grupo que lo rodea o el jefe del perjudicado.
“Tengo sospechas legítimas de que Frías no es la persona indicada para ocupar ese cargo y reitero, bajo ninguna circunstancia puede dirigir el departamento de Informática” dijo de manera enfática.
El juez comicial calificó de extraño que Rosario empoderara a Frías para ocupar la función de jefe absoluto de cómputos tras la renuncia de García, pese a que conoce que el artículo 6, de la Ley Electoral 275-97, establece que para el cargo como director de Informática debe estudiarlo el pleno en audiencia pública y con la presencia de los delegados políticos.
En ese tenor, Olivares expresó que Rosario quiere hacer ver que lo que existe es un problema personal entre García y Franklin Frías, cuando la realidad es que es un asunto de visión y falta de confianza.
Mientras que los técnicos del departamento de Informática, mediante rueda de prensa, precisaron que no tienen compromiso más que con el país y la institución para la cual realizan su labor con transparencia, eficiencia y consagración.
Sostuvieron que la organización del proceso de transmisión, procesamiento y cómputo electoral sea efectivo, necesita ser ejecutado por un equipo humano y no por una sola persona.
Juez devela “plan perverso” en la JCE
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