DETROIT.- Las cajas de bebidas para festejar fueron subidas a un camión la noche del jueves afuera de la sede de los Vigilantes de Texas.
Las botellas tendrán que permanecer en el hielo por un rato.
C.J. Wilson tuvo mucho que ver con eso.
El zurdo de Texas fue apaleado con seis carreras en otra pésima apertura de postemporada y los Detroit Tigers ganaron 7-5 para acortar a 3-2 la ventaja de los Rangers en la serie de campeonato de la Liga Americana.
Los campeones defensores de la Americana desaprovecharon su primera oportunidad de avanzar a la Serie Mundial por segunda vez en la historia de la franquicia.
Ahora tienen dos oportunidades de ganar un juego de vuelta en su estadio y el dominicano Nelson Cruz _el primer jugador en conectar cinco jonrones en una serie de campeonato en cualquiera de las ligas_ se mostró confiado sobre las posibilidades de su equipo.
«Estuvimos en esta situación el año pasado, y nos fuimos a casa y lo concretamos», dijo Cruz. «Sabemos que somos un mejor equipo en casa y tenemos confianza en los chicos que vamos a tener sobre el montículo».
Derek Holland será el abridor por Texas para enfrentar a Max Scherzer en el Juego 6 este sábado por la noche.
Wilson fue el lanzador estrella de los Rangers durante la temporada regular con una foja de 16-7 y una efectividad de 2.94, pero ha perdido su toque en los playoffs.
El manager Ron Washington sugirió que Wilson simplemente tuvo mala suerte en una jugada clave que pensaba que iba a terminar en doble matanza.
El venezolano Miguel Cabrera pegó una roleta que rebotó por encima del tercera base y en la línea, lo que puso adelante a Detroit por 3-2 en la sexta entrada.
«Aprovecharon una oportunidad», dijo Washington. «Eso es lo que yo pensé».
Pero los Tigres también crearon sus propias oportunidades.
Delmon Young conectó dos de los tres jonrones de Detroit que recibió Wilson _ el alícaído Alex Avila pegó el otro _ y Ryan Raburn pegó un cuadrangular contra el relevista Koji Uehara en el séptimo inning.
Wilson dijo que el segundo vuelacercas de Young, un disparo de dos carreras en la sexta entrada, fue en un lanzamiento de quiebre que estaba arriba, y entró y salió de la zona de strike.
«Eso fue un lanzamiento complicado, pero él se metió a la zona y de alguna manera lo conectó», dijo Wilson. «Aprendí una lección con ese lanzamiento _ una muy dolorosa».
Eso coronó una productiva sexta entrada de los Tigres.