Guadalajara.- Cuba metió este miércoles a sus cuatro púgiles en competencia en la final del boxeo panamericano, que en dos ocasiones ganaron sus boletos a costa de México en los combates de semifinales.
El anfitrión, que tenía cinco representantes masculinos en la velada, sólo pudo colocar dos finalistas: Oscar Molina, quien derrotó al canadiense Mian-Imtiaz Hussain y peleará el oro en el peso welter, y Juan Hiracheta, que superó al colombiano Isaías Mena en el súper pesado.
Hiracheta, primer mexicano que llega a la última instancia del súper pesado en Juegos Panamericanos, se las verá en la final con el poderoso guante del ecuatoriano Ytalo Perea, que noqueó al puertorriqueño Gerardo Bisbal en el segundo asalto de la semifinal. El boricua logró ponerse en pie, pero, visiblemente desorientado, no pudo continuar la pelea.
La polémica de la jornada se vivió entre las mujeres, que definieron la lucha por los primeros oros panamericanos de la historia en boxeo femenino.
El árbitro dio la victoria por superioridad a la puertorriqueña Kiria Tapia sobre la argentina Celeste Peralta en el welter ligero (57-60 kilos), una decisión que el entrenador de la sudamericana, Juan Ledesma, calificó de robo.
Todos los perdedores se quedaron automáticamente con la presea de bronce, al repartirse dos en cada categoría.
El esperado doble enfrentamiento mexicano-cubano se saldó con victorias isleñas.
Robeisy Ramírez derrotó con contundencia 20-7 al mexicano Braulio Avila y peleará el oro del peso mosca frente al dominicano Dagoberto Agüero, quien venció 21-11 al brasileño Juliao Henriques.
«Ha sido difícil, por el público que tenía en contra», dijo Ramírez. «Tuve que hacer un combate muy estratégico».
«Cuba fue complicado y ahí están los resultados», señaló Avila. «Hay que trabajar más, centrarnos más. Todos esperábamos más. Hice lo que pude».
En el peso ligero, el cubano Yasnier Toledo sufrió en un combate igualado, sobre todo en los dos primeros asaltos. Pero el desenlace ante su rival mexicano Angel Gutiérrez fue el mismo: victoria cubana por 13-7.
«La pelea fue buena. Fue como una final adelantada», afirmó Toledo. «Ha sido y creo que va a ser la pelea más fuerte que he hecho en el campeonato».
«No alcanzó para la victoria», comentó Gutiérrez. «No tenemos excusa, no tenemos pretexto. Luchamos hasta el fin, hasta el cansancio, hasta morir».
Toledo luchará el oro contra el brasileño Robson Conceicao, quien derrotó 27-8 al puertorriqueño Angel Suárez.
La pelea más complicada para Cuba la lidió Carlos Banteurt frente al brasileño Myke Carvalho. Banteurt perdía 11-7 tras el conteo del segundo asalto.
Pero se lanzó con todo y consiguió igualar los puntos 14-14 al final del tercer y definitivo asalto. Los jueces dieron la victoria al cubano por mayor número de impactos 53-45.
«Sabía que iba abajo por cuatro puntos», explicó Banteurt. «Me mandé al ataque, casi suicida, sabía que estaba fuerte y sabía que no podría aguantar mi ritmo y salió la victoria».
«Fue un combate bastante exigente», añadió.
El cubano se medirá por el oro del peso welter con uno de los dos mexicanos que logró avanzar a la final. Molina venció 11-7 al canadiense Hussain Mian-Imtiaz.
«Siempre voy a los torneos mirando para la final y no me conformo con la plata», afirmó Molina. «Hoy (miércoles) bajé las manos y eso tenemos que ver y analizar con los técnicos».
«Hay que seguir con mucha energía, no aflojar», agregó.
En el pesado ligero, el cubano Julio la Cruz avanzó sin demasiadas complicaciones a la final tras imponerse 19-9 al ecuatoriano Carlos Góngora.
En la final se las verá con el brasileño Florentino Yamaguchi, quien derrotó 27-11 al mexicano Armando Piña.
En la categoría súper pesado, la única sin representación cubana, Perea avanzó a la final tras noquear en la lona al puertorriqueño Bisbal.
«El nocaut fue fuerte y contundente», señaló Perea. «La estrategia era llevar la pelea nosotros, pero no se puedo dar porque el rival salió a moverse mucho».
«Pero hicimos lo que teníamos que hacer para ganar», añadió.
La polémica saltó entre las mujeres. En la segunda semifinal del welter, la boricua Tapia se llevó la victoria por decisión del árbitro sobre su rival argentina Peralta en el cuarto asalto y después de haber ido por debajo en el marcador de puntos.
Aunque Tapia había remontado y estaba conectando buena cantidad de golpes, la argentina seguía de pie y parecía en condiciones de continuar.
Ledesma, entrenador de Peralta, denunció que la decisión se tomó porque la argentina es más fuerte y se iba a enfrentar en la final a la mexicana Erika Cruz.
«Esto es un robo total», dijo Ledesma. «Se ve bien a las claras que no querían ver a Celeste en la final».
«Veníamos en los puntos cómodo, la pelea no era complicada. Pero la sacaron, porque es la única que puede ganar a la mexicana», añadió.
La vencedora Tapia evitó entrar en un cruce de declaraciones sobre los jueces y se mostró feliz por la remontada y dispuesta a lograr el oro en la final, donde se enfrentará a la mexicana Cruz, quien derrotó 12-6 a la canadiense Sandra Bizier.
En la categoría de pesado ligero (69-75 kilos), la dominicana Yenibier Guillén venció 21-12 tras cuatro asaltos a la brasileña Roseli Feitosa y se metió en la lucha por el oro.
Su rival en la final será la canadiense Mary Spencer, quien demolió en la otra semifinal a la mexicana Alma Ibarra 19-5.