Hubo una época en la que Muhammad Ali se burló sin piedad de Joe Frazier, lo llamó feo y puso en duda su hombría.
Después que su más recordado oponente falleció el lunes por la noche, Ali se desbordó en palabras de elogio para Smokin’ Joe.
«El mundo perdió a un gran campeón. Siempre recordaré a Joe con respeto y admiración», dijo Ali en un breve comunicado. «Le envío mi cariño a su familia y sus seres queridos».
Frazier murió a los 67 años tras una corta batalla con el cáncer hepático. Frazier y Ali estarán vinculados por siempre, dos campeones del peso completo y enconados enemigos en el cuadrilátero que se enfrentaron en tres épicos combates entre 1971 y 1975.
Frazier ganó el primer enfrentamiento en el Madison Square Garden en la llamada Pelea del Siglo. Ali se apuntó los dos últimos.
Esos fueron los momentos que definieron la carrera de Frazier. Pero también fue el único púgil estadounidense que ganó una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de 1964 en Tokio. Fue campeón del peso completo desde febrero de 1970 hasta enero de 1973, una época cuando esa corona era realmente importante. Y era un querido hijo adoptivo de Filadelfia.
Y cuando disputó el último asalto de su vida el lunes por la noche, todo el mundo deportivo reaccionó a su deceso.
«Buenas noches Joe Frazier. Te amo, querido amigo», escribió en su cuenta de Twitter el ex campeón mundial George Foreman, quien vapuleó a Frazier para ganar el título.
Manny Pacquiao dijo que el boxeo perdió a «un gran campeón» y un «gran embajador».
Y no fueron sólo los boxeadores los que sintieron la pérdida de Frazier. La tenista Serena Williams lo consideró como un ícono y un pionero.
«Inspirador y querido. Extrañaremos tu presencia», escribió en Twitter.
Don King, el promotor de la pelea en Filipinas, estaba demasiado afectado por la noticia como para hablar, según un vocero.
Bernard Hopkins, otro púgil oriundo de Filadelfia, dijo que Frazier era tan querido en la ciudad que debería tener su estatua, como el boxeador ficticio Rocky.
«No deberías venir a Filadelfia sin saber quién es Joe Frazier. Es el momento perfecto para construir una gran estatua en agradecimiento por todo el amor que le dio a Filadelfia», indicó Hopkins.
Bob Arum, quien alguna vez fue promotor de Ali, señaló que la pelea en Filipinas fue «la pelea más grandiosa en la historia del boxeo».