El gobierno dominicano reconoció contar sin tiempo para cumplir las revisiones pendientes del acuerdo de garantía de crédito frente a terceros, con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que expira a finales de febrero.
Hubo propuestas del gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu, de que se extendiera la vigencia del compromiso por otros seis meses, apoyado por muchos empresarios.
Sin embargo, Juan Temístocles Montás Domínguez, ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, admitió que no hay tiempo para realizar las revisiones requeridas por el FMI, pero que las relaciones entre su gobierno y el organismo internacional de crédito no se afectarán.
El funcionario explicó que una de las razones por las que no hubo avances en el pacto fue la postura del FMI de que se aumentara en 18 por ciento la factura eléctrica.
Respecto a esta exigencia del Fondo, Montás indicó que el Gobierno determinó que no era oportuno ni adecuado incrementar la tarifa eléctrica y además porque se entendió que el aumento no era la única forma de afrontar los problemas de ese sector.
Detalló que al terminar un acuerdo se inicia un programa de postmonitoreo, aunque las autoridades dominicanas y el Fondo tendrán que ponerse de acuerdo para ver en qué momento vendrá una misión a iniciar los trabajos de control.
Aclaró que un programa de postmonitoreo no implica el desembolso de dinero.
La semana pasada el director del Departamento de Relaciones Exteriores del FMI, Gerry Rice, advirtió que de no cumplirse la séptima y octava revisiones del programa con Dominicana, el crédito expiraría a finales de febrero.
Rice informó que las autoridades dominicanas y los comisionados del Fondo continúan las negociaciones a fin de llegar a un entendimiento respecto a los términos del convenio.
El Gobierno dominicano y el FMI firmaron el acuerdo stand-by (consumo en espera) en octubre del 2009, por un monto de mil 700 millones de dólares.