Unas de las características infantiles que más admiro es la capacidad de asombro ante la cotidianidad. Con el paso de los años, las experiencias buenas o perjudiciales, van dejando un rastro en la conciencia humana y muchas personas pierden el encanto de lo nuevo y condicionan con su prejuicio, la manera de ver la realidad.
La convocatoria electoral de 2012 advierte la perspectiva de género, para quienes aspiran a cargos públicos e instrumentaron medidas para evitar el triste caso de las “Juanitas” quienes, no por casualidad, una vez electas “renunciaron” a favor de sus sustitutos varones. Todas las propuestas para ser elegidas reclaman demostrar el liderazgo que demanda la campaña para alcanzar el voto a la representación popular.
¿Qué es ser líder? ¿Quiénes identifican el liderazgo, previeron esas orientaciones para las mujeres? ¿Cuál será el tipo de liderazgo femenino?
Las palabras pronostican otras respuestas, que pueden impresionar si todavía queda alguna capacidad de asombro. Según el Diccionario de la Lengua Española liderazgo, se define como la dirección, jefatura o conducción de un partido político, de un grupo social o de otra colectividad, mientras que el Diccionario de Ciencias de la Conducta, lo precisa como las «cualidades de personalidad y capacidad que favorecen la guía y el control de otros individuos». Otras definiciones señalan: -«El liderazgo es un intento de influencia interpersonal, dirigido a través del proceso de comunicación, al logro de una o varias metas»
Obsérvese en textos y los medios audiovisuales que identifican al líder como condición masculina. El filósofo Hugo Landolfi especifica: “…es el ejercicio de las actualizaciones y perfeccionamientos de un ser humano, denominado líder, quien por su acción se coloca al servicio del logro, a través de una misión, de uno o varios objetivos propuestos. Dicha visión debe alinearse y subordinarse necesariamente al
Ante la necesidad de hallar una adecuada capacitación a esas mujeres que, serán aspirantes con posibilidades de ser elegidas para un cargo público, conviene adecuar nuevos vocablos, conceptos, ampliar definiciones, sobre liderazgo, donde se esclarezcan las condiciones diferentes de las mujeres para ejercitar esa acción con matiz político, ideológico, partidista, económico o administrativo.
La capacitación ocupará lugar decisivo y nuevamente el Instituto Colimense de las Mujeres junto con instituciones del Gobierno de Colima, anuncian nuevos talleres para hombres y mujeres acerca del
El lenguaje como organismo vivo cambia, se enriquece con las dinámicas sociales que transforman las actitudes según las circunstancias. Es posible que la presencia femenina mayoritaria influyan decisivamente en los resultados de las urnas, claro si se logra el ejercicio consciente de las mujeres para ejercer el sufragio como un derecho constitucional alejado de imposiciones patriarcales como prevé la ley electoral. Ya era tiempo de prever su participación en las candidaturas, según la posición política y el color del partido de su elección para poner fin, al carácter absolutamente masculino de las tradiciones electorales mexicanas y latinoamericanas.
Urgen nuevos programas dentro de las campañas y otras maneras de fortalecer el trabajo político ideológico hoy con perspectiva de género. No hay que temer, la capacidad de asombro es necesaria para descubrir nuevos puntos de vista sin pre-juicios, como la fascinación de niñas y niños que se divierten ante lo novedoso.
Fascinación ante la diferencia
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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