El cólera se ha extendido a la provincia de La Vega, donde al menos cuatro personas se encuentran recluidas en el hospital Luis Morillo King, de esta ciudad y en un centro de salud de Santiago, aquejados de la enfermedad, según confirmaron autoridades del Ministerio Público en la zona.
Los afectados de cólera residen en las comunidades de Guaco, Los Valerios, La Piñita y la Jina de la Vega.
Otras 20 personas han sido tratadas en centros asistenciales presentando los mismos síntomas y sus habitantes temen que surja un brote de la enfermedad.
El director provincial de Salud Pública en la Vega, Demnis Marte, informó que ese Ministerio ha iniciado una intensa jornada de educación y orientación en los hogares de esas comunidades para evitar la propagación de la enfermedad, que el año pasado causó decenas de muertes.
El funcionario atribuye la enfermedad al consumo de agua contaminada del río Guaco, el cual se infectó por las inundaciones causadas por las lluvias.
Sobre ese aspecto, reveló que la intensificación de los aguaceros ha arrastrado heces fecales a través de las fuentes acuíferas que desembocan en el citado río, induciendo diarrea, cólera, fiebre y otras enfermedades.
Los afectados de cólera fueron identificados como Angelina Valerio, de 83 años; su nieta Roselín Marmolejos Valerio, de 21 años; José Arias, de 52 años y Arturo Benzán, quienes se enfermaron luego de tomar agua fuera de sus casas, afirmaron.
Marte agregó que no se han producido muertes por causa de la enfermedad y que para evitar decesos las autoridades han tomado todas las medidas de tratamiento adecuado, así como de prevención.
El funcionario recordó que las medidas higiénicas para evitar enfermarse de cólera incluyen: lavarse las manos antes y después de ir al baño y de igual manera al comer; hervir por unos 10 minutos el agua de beber, o aplicarle 5 gotas de cloro por cada galón; así como dejarla reposar antes de ingerirla; lavar la ropa sucia con abundante agua y mucho cloro.
Asimismo, limpiar las verduras con agua y cloro antes de comerlas crudas, igual que otros vegetales y frutas; lavar bien los utensilios de cocina y las manos luego de cambiarle el pañal al bebé.
El cólera no da tregua en el Cibao
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