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Plan de gobierno participativo y descentralizado

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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Darle mayor poder a las provincias para enfrentar sus problemas con ayuda del gobierno central en las aéreas de obras públicas-caminos vecinales, carreteras, asfaltado de calles-, en Salud con la construcción de nuevos hospitales, policlínicas, boticas populares, ambiente, seguridad-la Policía Nacional solo se dedicaría a la investigación de crímenes, y narcotráfico. Cada provincial habría de crear su propio cuerpo policial que operaria para problemas de tráfico, robos, violaciones, y casos judiciales de pequeña monta. También tendría un dirección de educación independiente con su propio presupuesto, para construcción de escuelas, formación de educadores, cuerpo de orden y seguridad.

La policía nacional y las fuerzas armadas tendrían a su cargo defensa de la soberanía, custodia de establecimientos públicos, custodia de funcionarios públicos y el cuidado de los recursos forestales e hídricos…

El gobierno central debe evaluar con todos los sectores representativas de cada provincial, municipios, empresarios, Iglesias, amas de casa, padres de familias, juntas de vecinos, agricultores, estudiantes, y obreros si los hay en fin todos los sectores para plantearle la descentralización del gobierno de modo que sean las provincias las que se hagan cargo del manejo de su presupuesto con una asignación federal de acuerdo a lo recaudado mediante impuestos. En principio deben otorgarse partidas iguales a la media del más alto ingreso por provincial de modo que las más provincias más pobres gocen de alguna  ventaja inicial porque dispondrán de iguales recursos que las más ricas.

No obstante tiene que contemplarse partidas especiales provenientes del gobierno central de modo que las necesidades más urgentes en determinadas provincias sean ricas o pobres, sean atendidas de modo particular con más recursos que tendrán que ser estrictamente controlados por una comisión mixta tanto de la provincia-municipio como el gobierno central de modo que no haya ningún desvió indebido hacia otras necesidades o sea sujeto de apropiación irregular por cualquier sector o persona.

El gobierno vía el congreso deberá crear un organismo de supervisión y control que cuente con el aval de la sociedad por su honestidad y capacidad y que sean escogido en igual número de provincias dos por cada una de modo que nadie se sienta discriminado o acosado de algún modo.

El cuidado del ambiente debe ser prioritario de tal modo que haya una dirección nacional de parques con su propio presupuesto que se encargue de crear grandes parques provinciales y de su cuidado. De igual modo cada ciudad debe contar con un mínimo de parques públicos de acuerdo con las necesidades de expansión de las distintas comunidades y a los patrones más modernos del mundo en ese momento.

La agricultura adquiere igual categoría siendo el gobierno el principal proveedor de recursos para los pequeños y medianos agricultores y promover del uso intenso de tecnología respetuosa del ambiente y que logre el auto sustento del país sin descuidar el sector de exportación generador de divisas que debe contemplarse con particular cuidado.

El sector turismo debe ser una preocupación tanto particular como general es decir de responsabilidad compartida entre cada provincial y el gobierno central de modo que las playas y ríos estén al cuidado minucioso del gobierno central mientras los sitios históricos y del interior del país deben estar bajo el cuidado y usufructo de cada provincial con su consiguiente organismo de control de gastos y recaudación de recursos por ese concepto.

La corrupción como mal social debe ser combatida tanto por las autoridades provinciales como las del gobierno central con la creación de mecanismos de supervisión que eviten la apropiación indebida de recursos públicos. A los empleados y funcionarios públicos deben dotársele de un salario decente con todos los beneficios, de salud, seguro de vida, plan de retiro, reconocimientos con viviendas, ascensos, alza de salaries etc… que sean reflejo o fruto de su buen y honesto desempeño en el manejo de los recursos públicos.

La seguridad debe ser una prioridad de primer orden creando las condiciones para acorralarla y controlarla de forma definitiva creando a nivel provincial Fuentes de trabajos públicos justamente pagados, creación de escuelas de oficios y carreras medias así como la instalación y mantenimiento de redes de centros deportivos y gimnasios públicos que distraigan a la juventud sobre todo en sus horas de ocio.

El combate al narcotráfico debe ser también prioridad provincial y del gobierno central que deberá de dotar a los cuerpos especializados que los combatan con equipos y salaries decentes con todos los beneficios, así como buscar legislaciones nacionales que condenen con dureza ese delito y que para que los jueces y testigos puedan aplicar la ley que los juicios sean realizados con la debida protección de cada uno de esos representantes de la ley.

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