Gillan no ve nada malo en el manejo de Pastor Maldonado

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||

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La multa de 10 mil euros a la que se hizo acreedor Pastor Maldonado, luego de su encontronazo con Sergio Pérez en Silverstone, es la séptima sanción que el venezolano recibe esta temporada (en apenas en 9 carreras!). Este número es (obviamente) el más alto entre los 24 pilotos de la actual parrilla.
 
Pese a esta situación, los directivos de Williams no han perdido la fe en Pastor Maldonado y siguen manifestando su apoyo al piloto sudamericano. Así lo ha hecho hoy Mark Gillan, el Jefe de Operaciones de Williams, para quien el más reciente episodio protagonizado por su piloto no ha sido más que un incidente de carrera:
 
Lo hemos revisado y en nuestra opinión Pérez apretó a Pastor. Pastor tenía la línea interna, frenó y bloqueo las gomas. Puedes ver una severa sacudida cuando él está peleando con la parte trasera del coche, se mueve hacia la derecha y golpea a Pérez. Así que, para mí, esto es un incidente de carrera. No veo ninguna otra cosa.
 
El que en Williams no vean mala fe en el último lance de Pastor no significa que no hayan hablado con el piloto para tratar de serenarlo:
 
Por supuesto [que hablamos con Pastor]. A ambos pilotos les decimos: terminen las carreras, pero en esta ocasión, cuando [Maldonado] frena en la línea, el coche desafortunadamente pierde agarre y simplemente no pudo controlarlo. Definitivamente él no quiso pegarle a Pérez, eso es seguro.
 
Algunos podrían suponer que tantos golpes y sanciones –además de la resultante atención de los medios- podrían comenzar a afectar la confianza de Maldonado. Gillan no lo ve así y asegura que la fortaleza mental de Pastor le permitirá manejar esta mala racha:
 
Es mentalmente muy robusto y ciertamente esa es una de sus mayores fortalezas. Él no se inmutó por esto y solamente quiere manejar el coche tan rápido como le sea posible y usualmente es lo que hace, así que no tengo preocupación alguna al respecto.
 
En parte comparto la evaluación de Mark Gillan, vaya, la acción con Pérez en Silverstone no me parece tan grosera como el contacto de Maldonado con Hamilton en Valencia (aquella sí inexcusable). El problema son los antecedentes de Pastor, que hacen difícil para los comisarios (y para los aficionados) suponer que el de Maracay no intenta apretar más allá de lo reglamentario a los pilotos con los que pelea por posición. Si Maldonado no quiere recibir un castigo ejemplar, más le vale alejarse de la polémica de aquí en más.