Una de las áreas en que el gobierno del presidente Leonel Fernández y el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), ha logrado merecer el reconocimiento de amplios sectores de la sociedad dominicana, ha sido la económica y muy particularmente por la forma metodológica que ha utilizado en la elaboración del Presupuesto Nacional.
Claro está, que también la estabilidad macroeconómica, ha sido uno de los puntales de la política gubernamental, pero en esta ocasión quisimos hacer referencia de manera especial al progreso que en los últimos años se ha logrado con la orquestación y estructuración de esa pieza fundamental para el desarrollo nacional, que es el Presupuesto de Ingresos y Gastos Públicos.
Aun cuando muchos sectores, con razón o sin razón, han criticado la no inclusión en su totalidad del 4 por ciento de la educación en el Presupuesto Nacional, debemos reconocer que las partidas que anualmente han sido consignadas en esa pieza han ido siendo incrementadas de acuerdo a las necesidades de la sociedad dominicana.
Precisamente es la sociedad, la que para el año 2013, ha venido demandando un incremento considerable en el Presupuesto Nacional para poder hacer frente a las demandas de la población que cada vez se hace más numerosa y exigente ante los elegidos para dirigir los destinos de la nación para que cumplan con las promesas de campaña y resuelvan los múltiples problemas que afectan las comunidades del país.
Sin embargo, en aras de dar respuestas a esas necesidades, todo parece indicar que necesariamente tendremos que transitar nuevamente por el curso del conocimiento de una nueva reforma fiscal, que de acuerdo a los sectores empresariales han abogado porque la misma vaya dirigida a la reducción de impuestos y a la eliminación de exenciones y privilegios de que disfrutan algunos sectores.
No obstante para ello se encuentran preparados los técnicos y funcionarios del Ministerio de Económica, Planificación y Desarrollo y de la Dirección General de Presupuesto, quienes se encuentran ponderando todas las alternativas que se vienen planteando para estructural el instrumento de desarrollo nacional que necesitará el país para el próximo año 2013.
Nos consta la pericia y la sapiencia que en estos menesteres han demostrado a lo largo de estos últimos años, los técnicos Hernán Paredes, de la Dirección General de Presupuesto y Melvin Castillo, así como otros destacados funcionarios de esas dependencias gubernamentales que cada año, cuando se aproximan estas fechas dedican tiempos extras al estudio, ponderación, análisis y estructuración de nuestro Presupuesto Nacional.
Desde luego, en esta ocasión, todo indica que el trabajo y el esfuerzo que desplegaran los técnicos para la elaboración de esa pieza tan importante para el país, deberá ser mayor, debido a las demandas que han venido haciendo los diferentes organismos del Estado y la sociedad dominicana en su conjunto.
Pero ante todo eso, se ha perdido de vista, el interés que han manifestado diversos sectores de la sociedad dominicana, incluyendo al presidente electo Danilo Medina, en que el país suscriba un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el cual también impondrá sus condicionalidades al gobierno sobre la elaboración del Presupuesto Nacional de cara al 2013, situación que se torna más compleja y trabajosa para los técnicos encargados de elaborar ese proyecto.
De ahí es que cobra trascendental importancia que técnicos como los que hemos señalado en esta entrega y otros que juegan un papel fundamental en la elaboración, análisis y estructuración del Presupuesto de Ingresos y Egresos de la nación, sean preservados por el presidente electo para que le puedan ayudar a realizar un trabajo igual de competente como el que han venido realizando en sus respectivos organismos, por las experiencias acumuladas en esas labores.
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