A pocos días de que el electo Presidente de la República Dominicana, Danilo Medina, asuma los destinos de la nación, las expectativas aumentan en función de la confianza puesta en él y en la manera en que enfrentará cada desafío que tiene ante sí.
Se trata de “enderezar” la educación y dignificar a los maestros; de procurar una salud preventiva, que atenúe la curativa; de acabar con el caos en el transporte; sin dejar a un lado la corrupción que ha calado fuerte en las más altas esferas de las instituciones del Gobierno, entre muchas otras cosas.
Se recuerda que Danilo Medina fue durante mucho tiempo un excelente estratega en el Gobierno de Leonel Fernández. Pero, esta vez no le corresponderá colocar “placebos” (tranquilizantes), a los problemas, sino enfrentarlos con otra óptica y demostrar que este período gubernamental del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), dará soluciones definitivas a los reclamos de la nación.
Los años han transcurrido y con ellos la ciudadanía, cansada de discursos de campaña, espera verbos y acciones.
Ojalá que los viejos retos encuentren en el nuevo mandatario la “corrección de lo que está mal… continuar lo que está bien y hacer lo que nunca se hizo”. Sobre todo esto último.
Lo que nunca se hizo
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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