El jefe de la escudería española HRT piensa que aún tienen mucho desarrollo por delante en la segunda mitad de temporada. Con un presupuesto tan reducido, el F112 parece estar en estos momentos a años luz del resto de monoplazas presentes en parrilla y tiene, como mayor lastre, su pobre diseño aerodinámico.
Para empezar, partamos de una cosa: en esta temporada, el rendimiento de HRT sólo puede medirse en función de los resultados obtenidos por Marussia, su directo competidor en la parte trasera y la única escudería que puede equipararse en nivel a la española (tirando hacia lo bajo, se entiende). Fuera de eso, cualquier comparación con alguno de los demás equipos resulta absurda y fuera de lugar, pues a estas alturas es evidente que las dos escuderías mencionadas están a otra cosa: a comenzar otra vez desde cero y a sobrevivir, como se pueda, a este primer año.
Una vez dicho esto, podemos estar de acuerdo en las características que el jefe de la escudería HRT, Luis Pérez-Sala, ha mencionado en su última entrevista antes de irse de vacaciones como sensaciones positivas de su monoplaza: fiabilidad, resistencia mecánica y margen de desarrollo. Para Pérez-Sala, de momento, no se le puede pedir más al F112.
Creo que, en general, el coche ha dado un resultado bastante bueno, sobre todo teniendo en cuenta cómo empezó…
El jefe de HRT se refiere, sin duda, a los meses previos al inicio de temporada, cuando el coche les fue entregado prácticamente sin tiempo para revisarlo ni ponerlo a punto.
Incluso con todos los obstáculos, el coche ha dado buenos resultados. Tiene una buena base, y ésa es su mayor fortaleza. Es un coche fiable, con buena resistencia mecánica y ofrece un montón de posibilidades para su desarrollo.
De momento, en las 11 primeras carreras de la temporada, HRT suma sólo un abandono más que Marussia (cinco, frente a cuatro… no demasiados, si nos fijamos por ejemplo en que el mismísimo Michael Schumacher se ha retirado en seis grandes premios) y fuera de eso, ha podido finalizar el resto de carreras; así que lo de la fiabilidad y resistencia mecánica pueden colar. En cuanto a lo del margen de desarrollo, es obvio. Como bien señala Pérez-Sala, puede que el F112 tenga una buena base, pero no sirve para competir con las actuales máquinas que corren en la Fórmula Uno y la prueba de ello es que, en todos los grandes premios que llevamos, no ha podido subir del 17º lugar logrado por Pedro de la Rosa en Valencia. Por lo tanto, margen de mejora tiene por delante, y mucho.
Yo diría que estamos en un 50 por ciento de su potencial y que todavía podemos extraer otro 50 por ciento, principalmente en la aerodinámica.
El gran lastre del monoplaza de HRT: la aerodinámica… Como aficionados, es imposible no dar valor al esfuerzo y la valentía de la escudería española, ni al logro que supone para De la Rosa y Karthikeyan llevar a este monoplaza hasta la meta en cada carrera. El presupuesto de HRT es pequeño, ínfimo, y eso repecurte directamente en los escasos medios que tienen para estudios aerodinámicos, tan necesarios si se quiere presentar -regularmente- paquetes de mejoras y actualizaciones.
De momento, el equipo ya ha anunciado que el coche tendrá novedades para el Gran Premio de Singapur a finales de septiembre que puede que les dé un extra de velocidad…. Suficiente. Al equipo más humilde de la parrilla no se le pude pedir más.
Pérez-Sala: “El F112 está a un 50 por ciento de su potencial”
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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