Hermán Echavarría, el cubano-americano que maneja la cuenta del Ministerio de Turismo de la República Dominicana en Miami, Estados Unidos, nueva vez es el centro de una denuncia por incumplimiento de acuerdos relacionados con sus funciones.
Actualmente, el promotor turístico Bryan Peña se encamina a depositar una demanda ante los tribunales de la Florida, en la cual exige al señor Echavarría la indemnización de unos US$10 mil por negarse a pagar espacios en actividades de promoción turística, previamente contratados.
“El señor Echavarría nos aprobó varias propuestas y después se negó a pagarlas. Yo tengo pruebas de facturas y fotografías de los eventos. Se niega a contestar las llamadas telefónicas, correos electrónicos y los registros que le enviamos. En estos momentos estamos en le proceso de entablar una demanda legal”, precisó Peña.
Sostuvo que desde el pasado mes de febrero, fecha en que tuvieron lugar los eventos mencionados, ha diligenciado la retribución del trabajo que de manera profesional y amigable hizo a petición de Echavarría, a lo que el beneficiado no ha respondido.
Bryan Peña explicó que el cubano-americano es reincidente en hacer ese tipo “tropelías”, ya que conoce de otras personas con las que tiene litis por negarse a saldar deudas contraídas.
Esta se suma al “rosario” de maniobras en perjuicio de la comunidad dominicana en Miami, que vienen denunciándose sistemáticamente. Cabe recordar que la promoción turística dominicana en esa ciudad norteamericana opera dentro de las oficinas personales de Hermán Echavarría, por lo cual exige renta por el espacio.
Renombradas publicitarias criollas están preparando un comunicado para hacérselo llegar al presidente electo, Danilo Medina, con la finalidad de, entre otras cosas, presentarle documentos del dinero que se gana Echavarría en dicho cargo, donde se caracteriza por no invertir en la promoción del país, ni apoyar a la comunidad dominicana.
Según los informes, el mencionado negociante maneja millones de pesos en la oficina de Turismo y no se ve nada de lo que ha hecho: “al menos que no sea de sacarle provecho personal, haciendo negocios en Santo Domingo, Cuba y otros países de la región”.
El exaspirante a alcalde de la ciudad de Hialeah, ha cultivado buenas relaciones con personas de poder en la República Dominicana, país donde contrajo matrimonio hace algunos años.
“Lo que nosotros queremos es que le quiten la cuenta de la oficina de Turismo, porque no es dominicano, tiene una mafia negociadora con ella, no está haciendo el trabajo y no deja ningún beneficio al país”, habría comentado uno de los publicistas presentes en la reunión.