Las sociedades violentas alimentan el feminicidio

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||

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En los países donde la violencia contra la mujer es permanente y no se toman las medidas de lugar para frenar o disminuir los feminicidios, en esas naciones, el derecho a la vida no es defendido por quienes gobiernan y para algunas autoridades no es algo prioritario. Consideran las crueldades en contra de las féminas como hechos normales, pues son hijos de una cultura machista, trasmitida de generación en generación.
 
Es en los países atrasados política, económica y socialmente, donde la violencia contra la mujer es más frecuente, esta acción perversa se da cuando los que dirigen el Estado combinan su rol de autoridad con la de cómplices voluntarios de los delitos cometidos, de ahí que, hay maltratos a la mujer; además, donde hay pobreza, falta de educación, narcotráfico, ausencias de oportunidades para el desarrollar del individuo, corrupción en las instituciones públicas y privadas, no se puede esperar menos.
 
Centro América, las islas del Caribe, parte de Sudamérica y algunos países europeos, aparecen encabezando esta lista negra de feminicidios. En los últimos 100 años, estas zonas han sido dominadas por dictaduras, guerra civil y opresión y represión para los grupos indefensos. Esto establece claramente que en los países o ciudades donde la injusticia ha sido la protagonista de su historia, la herencia son la violencia, el desorden y la falta de voluntad política.
 
Las organizaciones que se interesan por las estadísticas o record mundiales sobre la violencia contra la mujer, colocan la República del Salvador como número uno, seguido de Jamaica, Guatemala, Sudáfrica, Rusia, Guyana, Honduras, Azerbaiyán, las Antillas, Colombia, Bolivia y otros países, incluyendo la República Dominicana, que aunque a nivel mundial aparece en el número 24, en América Latina ocupa la posición número cinco. También se incluyen como zona de peligro para las mujeres, ciudades o regiones como Antioquia en Colombia y ciudad Juárez en México.
 
Algunos de estos países han vividos bajo dictaduras, unos tienen años de guerras internas y otros están gobernados por grupos que han lacerado la estructura del Estado, dándole poder al narcotráfico, la trata de blanca, el tráfico humano, venta de armas y han convertidos a sectores de Las Fuerzas Armadas en instrumentos al servicio de la delincuencia. En ocasiones tomando una actitud agresiva frente a los sectores desamparados y en otras, asumiendo una actitud pasiva frente a los agresores y de represalia contra los agredidos.
 
Un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), precisa que por causa de la violencia mueren anualmente 66 mil mujeres y que 17% de ellas son asesinadas de manera intencional, ese mismo informe dice que el 80% de las mujeres muertas en ciudad Juárez, fueron asesinadas con armas de fuegos. Una información del periódico EL Universal, señala que en el Salvador, el promedio de los feminicidios es de 560 por años, pero en 2011, llegó a 647; en Guatemala, del 2002 al 2011, los asesinatos de mujeres superaron la cifras de los 5,000.
 
Esta realidad es muy parecida en México, Centro América, las islas del Caribe y parte de América del Sur, en todas esas áreas la mujer está muy expuesta a la violencia domestica; Según un informe del Instituto Nacional de Estadística Geografía e Información( INEGI) de México, en el Estado de México, en el 61% de los matrimonios se ha ejercido la violencia, pero en 513.000 mujeres, o sea en el 30% de los matrimonios en ese estado mexicano, se ha llegado a la violencia extrema por parte de sus conyugues, como ser pateadas, amarradas o ahorcadas.
 
En esa misma situación viven las féminas de Sudáfrica, y de la antigua Unión Soviética: Rusia, Ucrania, Letonia, Moldavia, Lituania, Estonia y Kazajistán; en los últimos años, la violencia de género ha ido en aumento en Venezuela, Brasil, Bahamas, Belice, Ecuador; en el renglón de los países violentos esta la República Dominicana, con una participación de más de 5.000 policías y militares involucrados en hechos violentos y de narcotráfico, con un promedio superior a las de 600 mujeres asesinadas en los últimos 5 años y reportadas más de 1, 153 como víctimas de la violencia.
 
Nuestro país es parte de un grupo de Estados que viven sumergido en el atraso, donde hasta el aborto es prohibido, la historia nunca había marcado tan cruelmente la vida de la mujer en nuestros país, desagraciadamente también somos integrantes de las naciones con las mayores desigualdades sociales, donde la riqueza está en manos de unos pocos y las estructuras policiales y judiciales son apenas una sombra dentro de la oscuridad que vive la nación.
 
Para la nación dominicana, me gustaría insistir en la propuesta de la diputada Adelys Olivares, en el sentido de comprometer a los medios de comunicación en una campaña nacional contra la violencia en general y en especial contra la mujer y los menores. En los hogares donde hay violencias, los hijos son las principales víctimas y los que más sufren, por lo que debe contemplarse aumentar el número de instituciones que permitan el desarrollo de programas preventivos en las zonas o ciudades donde el problema ha tomado fuerzas, estos proyectos deben estar integrados y dirigidos por profesionales de las áreas sociales y la salud.