Muchas expectativas se crearon en la población cuando se supo que el Presidente de la República Danilo Medina Sánchez rendiría cuentas por los primeros cien días que lleva su Gobierno.
Temas como el plan de alfabetización y medidas de austeridad; así como “los pormenores del próximo presupuesto nacional y la reforma fiscal que tantas críticas han generado”, formaron parte del interés nacional. Y es innegable que Medina se proyecta consecuente con sus promesas de campaña y la manera en que ha intentado llevar las riendas, denota que desea dirigir esta nación por caminos mejores. Pero, ¿cuánto puede hacer el gobernante? Aun cuando la alocución fue un llamado a la transparencia de sus seguidores y que la corrupción pase a ser cosa del pasado, se sabe que lo que más tarda en cambiar en el ser humano es su pensamiento y aunque el Presidente afirme que destituirá a todos los funcionarios que no cumplan con el Código de Ética, sus intenciones van avaladas y consecuentemente realizadas por la mayoría de un equipo que aprendió a hacer las cosas diferentes.
El Presidente solicitó ver el futuro con esperanzas, el pasado sin revanchismos y que no se pierda el tiempo en lanzar piedras hacia atrás.
Pero, si algo hay que señalar como logro en este primer período de la administración de Danilo Medina, es que un grupo de jóvenes haya levantado esos ánimos que hasta hace poco estaban adormecidos, o dirigidos a otros derroteros inválidos. El mandatario les pidió paciencia y les otorgó el derecho a desconfiar en los políticos dominicanos.
Cien días representan poco tiempo en el convulso mundo que se vive, en la sucesión continua de días y noches que en el país han dejado una estela de evasiones y violencias.
El jefe de Estado deberá luchar contra todo esto- es su promesa-, y coadyuvará a cumplir las metas de desarrollo de la República Dominicana; que sectores como La Barquita (que son muchas barquitas) salgan de la miseria y miles de familias dejen de vivir en la pobreza extrema; que haya miles de empleos más; que progrese el sector agropecuario y las pequeñas y Medianas Empresas también… En fin, un lector de este multimedios escribió con certeza: “Danilo Medina es un preso de confianza de los corruptos del PLD”, librarse de ellos, sería llevar a cabo lo que nunca se hizo. ¿Podrá?