Como viene siendo habitual en todas las polémicas en las que se ve envuelto Red Bull, el asesor deportivo de la escudería austríaca ha dado su opinión sobre el desafío lanzado por Ferrari la semana pasada en relación al Campeonato ganado por Sebastian Vettel.
Presionado, según dicen, por su piloto, Fernando Alonso, la Scuderia presentó una petición a la FIA para que aclarase si el adelantamiento en Interlagos de Vettel a Vergne fue ilegal y, por lo tanto, si el alemán podría ser susceptible de recibir una sanción que le privase de su tercer Título mundial. La Federación puso fin a la polémica afirmando que no hubo ningún tipo de infracción, pero los de la bebida energética no han pasado por alto la intención de Ferrari de, una vez perdido en la pista, intentar ganar el título en los despachos. De hecho, Helmut Marko, siempre muy claro en sus apreciaciones, ha acusado a Alonso de no saber perder.
Parece que Alonso tiene problemas si no gana. Cuando no gana, entonces desarrolla increíbles habilidades políticas.
Al margen de lo ocurrido esta temporada, y con la satisfacción del trabajo bien hecho, en Red Bull ya miran al año que viene. Sobre sus posibilidades, Marko parece no tener dudas de que de nuevo serán el equipo de referencia y que, una vez más, Ferrari será el máximo rival al que tengan que hacer frente.
Asumimos que tendremos un monoplaza competitivo. ¿Por qué deberían cambiar tanto las cosas? Tenemos el mismo equipo.
McLaren se ha debilitado significativamente por la salida de Hamilton. A pesar de lo que diga Niki Lauda, no veo la posibilidad de que él esté compitiendo por el campeonato (con Mercedes). Eso deja solo a Ferrari. Seguramente volverá a ser una dura lucha con ellos.
