La partida asignada al Ministerio de Educación de RD$99,600 millones, equivalente al 4% del Producto Interno Bruto (PIB), crea un precedente en la República Dominicana, debido a que por primera vez en doce años, los candidatos a la Presidencia presentaron un programa detallado sobre cómo mejorar la educación y se comprometieron a otorgar un mayor presupuesto a este sector.
Esta medida fue llevada a cabo por unas 203 organizaciones civiles, agrupadas en el movimiento Coalición Digna, quien se encargó de mantener vigente durante 2012 el tema de la educación, pese a ser un año electoral.
El objetivo de la lucha que durante dos años realizó la población, finalmente obtuvo su resultado, por lo que este año es calificado de triunfo y apertura para un mejor futuro destinado a mejorar la educación del país.
En ese sentido, el director del Centro Bonó, padre Mario Serrano, considera que los recursos deben utilizarse para eliminar la sobrepoblación escolar, edificar estructura físicas, confortables, que cuente con los servicios básicos de iluminación, agua potable y con un ambiente propicio para estimular el aprendizaje.
“Todos los proyectos y programas financiados con el nuevo presupuesto de Educación deben ser transparentados, con el propósito de que realmente sean invertidos en mejorar la calidad de la enseñanza”, sostuvo el activista social.
Serrano entiende que de cara al 2013, lo que importa es lograr que esos recursos sean invertidos eficientemente e impedir que se vayan por la cañería de la corrupción y el clientelismo.
Explica que aunque el gobierno otorgó un pírrico presupuesto ascendente a un 2.7% del PIB, no fue ejecutado en su totalidad, por lo que de nada sirve asignarlo si no se ejecuta.
Sostiene que de la misma forma que el pueblo luchó por una mayor partida para la educación, tiene que abogar por responsabilidad fiscal de parte de los políticos, a fin de que se justifiquen los ingresos obtenidos de los impuestos y puedan regresar a la población.
“La nueva generación no puede continuar recibiendo el mensaje de que los políticos hacen lo que quieran con el arca pública y mucho menos ver la política como una forma rápida de conseguir dinero, sin importar cómo lo adquieren”, aclara el padre jesuita.
El padre Mario Serrano concluye que aunque el panorama hasta el momento es de expectativas, tiene la esperanza de que todos los objetivos que deben obtenerse con el 4% sean vistos por la población y la imagen de que la educación en el país es una de las más malas en la región, pronto se convierta en cosa del pasado.
Exigirán transparencia en aplicación 4%
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