No solo por los elevados precios del petróleo y los accidentes de las plantas de energía nuclear en Japón, sino por muchas razones más, las fuentes de energías renovables son segmentos del sector energético que requieren un crecimiento urgente e inmediato.
La OPEP mantiene niveles de producción y habla de disponer de suficientes reservas y la cantidad de petróleo requerida para satisfacer el mercado internacional; sin embargo, los precios del crudo suben, suben y en República Dominicana, pese a que Petrocaribe subsidia, ayuda y apoya, hay que buscar soluciones renovables.
Los actuales patrones energéticos están basados en los combustibles fósiles, en los que se incluye el petróleo como principal incluyente, así como el gas natural y el carbón vegetal. Desde el punto de vista económico esto pesa demasiado sobre la realidad de los países más pobres, por lo inaccesible de los precios, entre otros aspectos. ¿Qué hacer entonces? Primero que todo se plantea el ahorro en el uso de la energía, el fomento de la renovable y considerar, además, las opciones de cooperación a nivel global, incluso en el área de las naciones subdesarrolladas a partir de las iniciativas lideradas por la región.
En República Dominicana se ha instado a la formulación y orientación del Proyecto de Ley de Incentivos a las Energías Renovables y sus Regímenes. Programas implementados y otros, vaticinan el desarrollo de proyectos mediante los cuales será posible desarrollar iniciativas empresariales, que añadan valor agregado a sus sistemas de producción.
Estudios técnicos definitivos de proyectos de microcentrales hidroeléctricas (MCH), benefician a familias en comunidades rurales. Pero, sobre todo, se impone la implementación y gestión de microcentrales hidroeléctricas.
Según Enrique Ramírez, presidente de la Comisión Nacional de Energía (CNE): “las fuentes renovables están listas para despegar en la República Dominicana desde la aprobación de la Ley de Incentivos a las Energías, la cual ya ha atraído más de dos mil millones de dólares en nuevas inversiones de energía solar, eólica, hidroeléctrica, solar térmica, residual, etanol y biodiesel”.
En esas andamos, el Gobierno se ha comprometido a: “facilitar inversiones en el país, a través de la ley de energías renovables y su interés por seguir subsidiando el sector energético hasta que sea estable y sostenible”. Pero, aún no se ven resultados con la estatura que amerita un problema tan serio e impostergable.