Habrá que ver…

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||

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El director general de Migración, José Ricardo Taveras, ha afirmado que no tiene compromisos con nadie, solo con la ley, al abordar el tema de los haitianos que ocupaban el puente de Dajabón en la frontera domínico-haitiana y que  continuaban sin visado y también en relación con quienes se hallan en la parte frontal del Ministerio de Trabajo, desde hace más de 30 días, ante lo cual dijo que se quiere intermediar con la finalidad de encontrar una solución.
 
Amén de que en el país haya haitianos que no son bienvenidos, a pesar de que son los “carga block, pega mezcla, limpia patios, bota basura y vende jugos” maltratados; en tanto otros hacen negocios ilícitos, trafican con armas, drogas, donaciones, tecnologías y si son admitidos sin preguntárseles ni su nombre en los puestos de Migración y el Ejército en la frontera, también es cierto que a unos y otros debía imponérseles las mismas normas regulatorias que el resto de las naciones del mundo esgrimen para dejar entrar a sus  territorios inmigrantes sin los documentos requeridos.
 
De todos modos, la Dirección General de Migración entregó los primeros 210 carnet  para trabajadores extranjeros temporeros en el país, y con ello inició la regulación de la mano de obra foránea, a través de un documento en Aplicación de la Ley de Migración No. 285-04, que debe  servir para “que los trabajadores extranjeros contratados por empresarios nacionales, puedan circular sin inconvenientes y cotizar dentro del sistema de seguridad social”.
 
Hasta ahí, todo va de acuerdo a lo dispuesto por el director de Migración, quien aseguró a los ciudadanos haitianos que: «con este documento podrán salir a Haití a tomarse un cafecito y estar en la tarde en el país», sin ningún inconveniente, «ni el temor de que un soldado lo detenga» y como apuntó Cy Winter, jefe de misión de la Organización Internacional de la Migración (OIM), en República Dominicana: «Es un paso clave para el apoyo y la dignidad del inmigrante laboral de la República Dominicana, específicamente a los haitianos».
 
No obstante, habrá que ver qué papel desarrollarán los empleadores y desde aquí hacia delante, cómo cambiarán sus alternativas los corruptos que cobran a los míseros haitianos para atravesar la frontera… Habrá que ver cómo siguen las cosas …