Casa de la Masculinidad: reeducar patrones para evitar agresores

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El presidente de la Casa de la Masculinidad, el psicólogo clínico Gregorio Martes, reveló a DominicanosHoy interesantes aspectos relacionados con dicha institución, escenario destinado a resolver parte de los conflictos que presentan los hombres agresores en el hogar.
 
Indicó el especialista que “en este programa de prevención y terapia se les enseña a manejar el enojo y la ira, ya que son emociones básicas, universales y naturales, pero deben saber controlarlas para poder vivir en paz con las personas que comparten un mismo espacio”.
 
Aclara: “Si bien es cierto que estas emociones son mecanismos de defensa de los seres humanos; no es menos cierto que si no se frenan pueden convertirse en detonantes de problemas familiares, en los cuales tienen que intervenir las autoridades judiciales y del orden”.
 
Explica el terapeuta de parejas que muchas de las personas que se acercan a la entidad lo hacen por referimiento de un amigo y por voluntad propia, al reconocer que poseen una dificultad que no les permite convivir tranquilamente.
 
Algo poco divulgado en relación con el cáncer y las actitudes agresivas, es esto que precisa el especialista, al señalar que muchos varones han desarrollado esta enfermedad maligna en el colon, “porque tienen una carga emocional que no pueden soportar, como mantener a sus hijos, que en muchos casos son de varios matrimonios, y llega un momento en que ese malestar se convierte en una frustración, al no cumplir con el compromiso y terminan con un distres, que es el estrés dañino.
 
“Los psicólogos trabajamos con esos hombres para que puedan desentrañar el origen de la enfermedad y procuramos que sanen psíquicamente; a su vez, la situación de sobrevivencia con el cáncer mejora”, expone el también sexólogo.
 
Martes sostiene que para erradicar la agresividad en el sexo masculino es necesaria una reeducación de los patrones que tradicionalmente se les han implantado, a fin de terminar con la cultura machista, propia de los países subdesarrollados.
 
“En la Casa de la Masculinidad enseñamos a los hombres a ayudar en los quehaceres de la casa, puesto que la mujer aporta con dinero en efectivo y con fuerza laboral”, precisa y añade:
“Asimismo, se hacen conscientes de sus actos y asumen responsabilidades, lo cual es parte de la terapia que se aplica, la cual conlleva a perdonarse a sí mismo y corregir sus defectos, los cuales pueden estar en su temperamento, carácter o debido a un patrón aprendido en la niñez”.
 
Refiere el entrevistado que también a las féminas se les orienta para que sepan cómo lograr que sus esposos bajen el nivel de ira y agresividad y a negociar los oficios caseros o las compras del supermercado.
 
“Recibimos quejas de mujeres que dicen yo tengo que realizarlo todo porque él no quiere o no sabe hacer nada, ni siquiera elegir un buen producto en el súper. A esto respondemos que vaya con él e indique cuáles mercancías o productos son los favorables para mantener la salud de la familia y en la próxima le entrega el listado de la compra”.
 
El experto en conducta humana concluye que los esposos deben aprender a negociar lo que desean uno del otro; pero, lamentablemente ni en la escuela, ni en las universidades se imparten materias relacionadas con la forma y conductas de cada sexo, y esa deficiencia es la que tantas muertes y daños ha causado a la sociedad dominicana.
 
Finalmente, el psicólogo clínico Gregorio Martes exhortó a los interesados en recibir ayuda, visitar la Casa de la Masculinidad, ubicada en la calle Miguel Ángel Monclús 356, Residencial KJ. Apto A-3. Mirador Norte, Santo Domingo, o llamar a los teléfonos 809- 519- 4445 y 809- 549-7768.