close

Aprender, aprender y aprender

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
Facebook
Facebook
Youtube
Instagram

Es un tema de las mujeres. Precisamente en un momento donde se debaten nuevos asuntos acerca de la responsabilidad femenina en la sociedad, por su presencia en los espacios públicos.
 
Van quedando atrás, siglos de subordinación y servilismo, a los hombres porque fueron ellos quienes primero organizaron la estructura social, crearon y dirigieron las instituciones para establecer las normas que rigen su desarrollo.
 
Luego vinieron las guerras, los desastres, las inclemencias del tiempo y de la economía, entonces los hombres dueños de todo lo creado, requirieron de la presencia femenina para mantener y enriquece el desarrollo. Entonces, aprobaron la presencia de las mujeres en las universidades, en las facultades de tecnología, ingeniería, veterinaria o medicina, entre otras muchas posibilidades.
 
Ellas aceptaron el reto. Asumieron la responsabilidad de cumplir con la sociedad, custodias, policías, choferes, y demás profesiones donde el tiempo es un desafío con horarios irregulares, en madrugadas o con largas jornadas. La familia y sus respectivas parejas algunas veces comprendieron, otras no se resignaron y otras colaboraron. ¿Cuáles fueron las modificaciones de las conductas y actitudes? ¿De qué manera se reordenaron los tradicionales roles de género, por imposición o por convencimiento? ¿Cómo se fueron alterando conceptualmente las relaciones de pareja dentro y fuera de la familia?
 
Hallar posibles respuestas implica profundizar en el estudio de la perspectiva y el lenguaje de género, no como una asignatura independiente sino como una material de transversalidad social que puede influir en todas las facetas. Se trata entonces, de hacerlas visibles desde la palabras hasta la práctica atravesando la riqueza y de cambios conceptuales.
 
Las nuevas posibilidades que ofrece a las mujeres la libertad y la autonomía adquiridas paulatinamente, les demandan estar conscientes del costo que en lo individual, deben aportar a esa evolución social, económica, política, doméstica y educacional y otras esferas de la vida.
 
Muchas veces se considera al amor como un sentimiento intangible, sin apego a los cambios materiales e ignoran al amor que respalda las acciones hacia la transformación de conciencia desde la identidad personal, en el yo de la mujer que identifica la defensa de su autoestima.
 
La escritora norteamericana Marianne Williamson, de Los Ángeles, California, señala en su libro Volver al amor que éste se fundamenta como fuerza y no como debilidad, como cotidiana respuesta a las dificultades que afrontamos y propone alguna manera para considerarlo una solución práctica de aprendizaje.
 
Más adelante argumenta que tener libre albedrío no quiere decir que puedas establecer el plan de estudios. Significa únicamente poder elegir lo que quieres aprender en cualquier momento y… despejar los obstáculos que impiden experimentar su presencia.
 
Reconoce su proceso de aprendizaje: “Comencé a entenderme a mí misma, a tener algún atisbo de por qué mis relaciones habían sido tan dolorosas, por qué nunca podía continuar con nada, por qué aborrecía mi cuerpo. Y, lo más importante, comencé a tener cierta sensación de que podría cambiar. Volver al amor un libro sobre algunos de sus principios básicos tal como yo los entiendo, y los relaciono con los problemas con que nos solemos encontrar en nuestra vida cotidiana.
 
“A medida que empecemos a comprender con mayor profundidad por qué el amor es un elemento tan necesario para sanar al mundo, se producirá un cambio interior y exterior en la forma en que vivimos”. http://www.marianne.com/
 
*Maestra en Ciencias de la Comunicación

No Comments

Leave a reply

Post your comment
Enter your name
Your e-mail address

Story Page