El papa Francisco arribó esta tarde a Brasil en su primer viaje apostólico internacional para encabezar la Jornada Mundial de la Juventud.
Tras un vuelo de casi 12 horas desde Roma, el avión A330 de Alitalia aterrizó poco antes de lo programado en el aeropuerto internacional Antonio Carlos Jobim de Río de Janeiro.
Luego de algunas maniobras de la aeronave, el pontífice descendió de la escalerilla y fue recibido por la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, vestida de riguroso negro, junto con otros funcionarios de su gobierno y miembros de la Iglesia católica.
