La crisis del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), se acentuó este jueves luego de que los grupos que se disputan el control de la organización política, uno encabezado por el expresidente Hipólito Mejía, y el otro por Miguel Vargas Maldonado, realizaron por separado sendas reuniones de sus propios comités Ejecutivo Nacional (CEN).
La facción de Vargas Maldonado tuvo su encuentro en el Coliseo de Boxeo Carlos -Teo- Cruz, donde se votó para celebrar la convención perredeísta a fin de elegir las nuevas autoridades del partido el 23 de febrero de 2014.
De igual forma, designó a Peggy Cabral, viuda Peña Gómez, como presidenta en funciones del PRD; a Aníbal García Duvergé, secretario nacional de Organización, y a Junior Santo, secretario general.
De inmediato, Vargas Maldonado hizo la juramentación de los nuevos miembros de la cúpula perredeísta, quienes tendrán funciones interinas hasta realizarse la convención del PRD en febrero del próximo año, cuando se elegirán las nuevas autoridades.
El CEN de Vargas Maldonado tuvo un quórum del 74% de los miembros del organismo y las votaciones sometidas fueron aprobadas por unanimidad.
De su lado, el grupo de Hipólito Mejía se reunió en el Club Los Prados, donde se confirmó la asistencia del 80% de los convocados y se aprobó la creación de una comisión organizadora para los preparativos de la convención de esa entidad, pautada para el 27 de octubre.
También, los miembros del CEN-Hipólito aprobaron por unanimidad que Andrés Bautista continúe como presidente interino del PRD hasta que se elegían las nuevas autoridades.
Al dirigirse a los presentes, Hipólito Mejía advirtió que no se dejará humillar y que está decidido a luchar por la unidad y el decoro del partido. Señaló que no cree en una “caricatura de democracia” y que no se va a “dejar coger de relajo: no es verdad que vamos aceptar relajo de nadie y mucho menos humillación. La suerte está echada…a trabajar en la calle con dignidad”.
Apuntó que los que trataron de sacarlo del PRD no tienen moral ni los pantalones para echarlo. Mejía expresó que el apodo de traidor, en referencia a Miguel Vargas Maldonado, no se lo va a quitar nadie.
Previo a Mejía, Hugo Tolentino Dipp acusó a Vargas Maldonado de tener como negocio al partido blanco; mientras que Geanilda Vásquez reiteró que ese grupo, denominado los «perredeístas auténticos», irá a las calles a reclamar sus derechos.
En el encuentro del llamado CEN de Hipólito Mejía no faltaron las críticas al Partido de la Liberación Dominicana (PLD), y al Gobierno, a quienes acusan de confabularse con Vargas Maldonado para hacer daño a los perredeístas.
Mientras que Milagros Ortiz Bosch expresó que los miembros de esa organización partidista quieren un Partido Revolucionario democrático y no gobernado por un dictador, en alusión a Miguel Vargas Maldonado, quien se propone poner la organización política a favor de los gobiernos peledeístas, que calificó como los más corruptos que ha tenido la República Dominicana.
Este miércoles, el Tribunal Superior Electoral (TSE), declaró inadmisible el recurso de amparo interpuesto por seguidores del expresidente Hipólito Mejía, que buscaba suspender la reunión del CEN de Vargas Maldonado.
También procuraban que más de 600 dirigentes que fueron excluidos del CEN-PRD, fueran restablecidos como miembros de ese organismo.
El TSE rechazó la petición de la tendencia de Mejía en virtud de que las pruebas aportadas por este al tribunal, no han podido demostrar que los querellantes son miembros del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Dominicano.
Al ser cuestionado en torno a la decisión del TSE, Emmanuel Esquea Guerrero, quien encabeza la barra de la defensa de los seguidores de Mejía, expresó que su conciencia está limpia, pero que debido al último fallo del organismo, “ahora puede afirmar que la democracia está de muerte”.
Crisis PRD se acentúa
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