Con el espinoso caso del allanamiento en la villa Mulata III, propiedad de un alemán en Sosúa, Puerto Plata, desde donde “se esfumaron” 60 millones de pesos, se estaría aplicando el sabio y antiguo dicho que reza: no están todos los que son, ni son todos los que están.
Las consideraciones surgen a partir de una rueda de prensa, a la que recientemente convocaron ocho fiscales, en la que solicitaron que sea investigado en su totalidad el Ministerio Público de esa demarcación.
Dentro de quienes hicieron la petición se encontraban los fiscales adjuntos José Martínez Montás y Juan Carlos Hernández, quienes participaron en la requisa en la que murió un alemán y se habrían sustraído dos cajas fuertes con los RD$60 milloncitos.
Los servidores públicos rechazaron que durante la acción hayan actuado con irresponsabilidad, como alegara “su jefa”, la fiscal titular de esa jurisdicción, Alba Núñez Pichardo, quien a su entender no está siendo justa y está errando en su pronunciamiento de que ellos procedieron con ineptitud, porque alegadamente se le fue de las manos la requisa.
Pidieron al procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, investigar a la magistrada Núñez Pichardo, a quien acusan de asedio, así como de manejar a su antojo el caso de La Mulata III.
“Entendemos nosotros que la única participación que tuvimos era cumplir un llamado jerárquico de una labor que no se nos había encomendado con anterioridad. Nunca supimos de dicha investigación, que para nosotros fue una sorpresa encontrarnos con esa situación”, indicaron.
Recordaron que cuando llegaron al lugar de los hechos, ya la escena estaba totalmente arrabalizada y contaminada por un sinnúmero de agentes del orden y personal de la prensa y que ahí penetró todo “el que le dio la gana. Ahora se quiere pescar en río revuelto”.
De su lado, la Alianza Dominicana contra la Corrupción (Adocco), entiende que el procurador Francisco Domínguez Brito debió suspender a la fiscal de Puerto Plata, Alba Núñez, e incluirla entre los investigados por del caso donde resultó muerto Peter Ebert Demetrick.
El presidente de la entidad, Julio César de la Rosa Tiburcio, opina que la fiscal Núñez debe ser envuelta entre los investigados y procesados, como se hizo con los coroneles y oficiales a quienes se les impuso medida de coerción, ya que ésta, según él, fue la responsable de las irregularidades en esa operación.
Mientras que el director de Ética e Integridad del Gobierno, Marino Vinicio Castillo (Vincho), declaró que durante el allanamiento en La Mulata III se creó un ambiente de riesgo; pero, que esto no justifica que se haya cometido el “abuso criminal del botín”.
Vincho consideró que lo que procede es enjuiciar e investigar a cada uno de los involucrados para así condenar a los culpables a la pena máxima.
Antecedentes
El 16 de octubre del año 2012, un “equipo élite” de la Policía Nacional irrumpió a las 8:30 de la mañana, en la casa número 1, del proyecto La Mulata III, ubicada en la calle Subtes, del municipio de Sosúa, Puerto Plata.
La Policía informó que los fiscales no pudieron entrar a la villa de Peter Brunck, porque cuando llegaron a la entrada principal de la casa, junto a los agentes policiales, fueron recibidos a tiros por dos de los alemanes que se encontraban en la misma.
En una rueda de prensa “precipitada”, encabezada por el procurador general de la República, Francisca Domínguez Brito, y el entonces jefe de la Policía, José Armando Polanco Gómez, se informó que en la residencia intervenida operaba una secta satánica, y se presentó a los medios de comunicación un arsenal de armas ilegales, que incluía ametralladoras.
Sin embargo, no pasó mucho tiempo para que se descubriera que lo ocurrido en la Villa La Mulata III fue una vulgar acción y un vergonzoso pillaje policial (y posiblemente fiscal), que dejó muy mal parada la imagen institucional del país.
La representación diplomática alemana declaró que esperan que las autoridades dominicanas esclarezcan en su totalidad el caso, aunque se supo que el gobierno de ese país habría presionado para que se hicieran las investigaciones del atropellante allanamiento donde se perdió una vida.
Según datos obtenidos por este multimedios DominicanosHoy, la embajada de Alemania en el país ha llamado a sus ciudadanos y ciudadanas a cuidarse de la delincuencia y hasta de la misma Policía dominicana.
Imágenes recogidas por las cámaras de seguridad del complejo, en momentos que se realizaba el robo muestran cuando se cargaban dos cajas fuertes que contenían RD$60 millones, prendas y otros objetos de valor.
Aunque la Jefatura de la Policía Nacional y la Procuraduría General de la República dijeron en su informe que no tienen evidencia de las sustracciones, se sabe que fueron tomadas por agentes de la uniformada. Por lo menos seis de los policías investigados han reconocido la existencia de las cajas y a varios de ellos les han ocupado facturas y recibos de transacciones bancarias por sumas millonarias que no pueden justificar ante los investigadores.
La indagatoria da cuenta de que el capitán Gerson Acosta Polanco es uno de los oficiales que confirma la existencia de las cajas, donde presuntamente había euros y dólares equivalentes a RD$60 millones. Basados en los interrogatorios, el Consejo Superior Policial recomendó los retiros y cancelaciones de 14 oficiales y alistados que participaron en el caso.
Incluso, el capitán Acosta Polanco admitió haber visto cuando los tenientes “Nilson Peña Encarnación y Stalin Castillo Basora, y el sargento Pedro Antonio Hernández, alias Maceta, sacaban dos cajas fuertes por la puerta de la cocina de la residencia del alemán Peter Brunck, y la montaron en una guagua de la Policía Científica, que era conducida por el teniente Juan María Toribio y lo acompañaba el teniente Sandy Ramón Ferreira”.
Tras el cuestionamiento de diferentes sectores de que representantes del Ministerio Público no habrían actuado correctamente, la fiscal de Puerto Plata, Alba Núñez, defendió a sus representantes que participaron en el allanamiento y negó que hayan operado con negligencia.
Dijo que los fiscales no pudieron entrar a la villa de Peter Brunck, porque cuando llegaron al lugar junto a los agentes policiales, fueron recibidos a tiros por dos de los alemanes, “por lo que tenían que resguardar su integridad”.
Los europeos, propietarios de la residencia, a través de un documento que entregaron a los medios de comunicación, sostuvieron que no es un secreto para nadie que las dudas son muchas y siguen aumentando a medida que se conocen detalles de la famosa y cuestionada requisa.
Explicaron que la comunidad alemana fue objeto de atropellos y acusan a su compatriota Klaus Dieter Müeller de inventar las mentiras que originaron ese operativo ya que, presuntamente, se confabuló con autoridades de Sosúa y Puerto Plata, para llevar a cabo la inspección irregular en la que murió acribillado por agentes policiales dominicanos Peter Ebert Demetrick.
A la cárcel dos coroneles
Un tribunal de la provincia de Puerto Plata dictó un año de prisión preventiva contra dos coroneles y un teniente de la policía acusados de matar a un alemán, golpear a otro y herir a un haitiano durante intervención en La Mulata III.
En el operativo murió el alemán Peter Ebert Demetrick, su compatriota Gunter Lauer fue agredido y resultaron heridos de balas tres agentes de la Policía Nacional dominicana y el haitiano Rigau Petit Frere.
La medida dictada por el juez Osiris Reyes Vega, del Tribunal de Atención Permanente del Distrito Judicial, afecta a los coroneles Ogando de la Rosa, Roberto Santo Salcedo y al teniente Osiris Reyes Félix.
El Ministerio Público estuvo representado por la procuradora fiscal de Puerto Plata, Alba Núñez, y los fiscales adjuntos Elvis García y Grimilda Disla. La defensa legal de los tres oficiales pidió en la audiencia una fianza y la presentación periódica de sus clientes ante la Fiscalía, pero fue rechazada por el juez.
Los dos coroneles y el teniente fueron enviados al Centro de Corrección y Rehabilitación San Felipe de Puerto Plata, donde tendrán que cumplir los 12 meses de prisión preventiva.
Interrogarían a exjefe PN
La procuradora fiscal de Puerto Plata, Alba Núñez Pichardo, confirmó que hubo “irregularidades”, corrupción y robos en la actuación de oficiales y agentes de la Policía en el residencial La Mulata III, por lo que no descarta requerir la presencia del exjefe de la Policía, mayor general José Armando Polanco Gómez.
No obstante, aclaró que hasta el momento no han comprobado nada sobre los RD$60 millones supuestamente sustraídos durante la intervención policial y del Ministerio Público, “porque no se tienen evidencias al respecto”.
Explicó que en las requisas participaron dos procuradores fiscales y un fiscal adjunto, pero que éstos no estuvieron presentes en un tiroteo ocurrido en la parte trasera de la residencia de los alemanes por donde, presumiblemente, se sacó parte de los bienes sustraídos por los policías.
La población dominicana sigue atenta al desarrollo de las investigaciones sobre el caso de La Multa III, considerado el más grande y vergonzoso pillaje policial que ha tenido República Dominicana en su historia.
En caso Mulata III no están todos los que son
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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