El primer ministro británico, David Cameron, dijo el martes que un supuesto ataque con armas químicas en Siria fue «absolutamente aborrecible», que requiere de una acción de la comunidad internacional y que su país está estudiando una «respuesta proporcionada».
Un portavoz de Cameron dijo que el primer ministro es consciente de la necesidad de «presentar un caso claro» si tomara la decisión de utilizar la fuerza, añadiendo que las Fuerzas Armadas británicas están asegurando que se encuentran en la posición de responder militarmente si se les pide hacerlo.
«Es razonable asumir que nuestras fuerzas están adoptando planes de contingencia», dijo el portavoz a los periodistas, aunque enfatizó que aún no se ha tomado una decisión de usar la fuerza, y que cualquier determinación de hacerlo se basará en pruebas «de una variedad de fuentes».
Cameron acortó sus vacaciones para regresar a Londres y el mismo martes anunciará si convoca al Parlamento, que está en el período de descanso estival, para abordar la mejor respuesta a los últimos acontecimientos en Siria. Cameron cree que el Parlamento debería tener la última opinión sobre estos asuntos, agregó el portavoz.
Cameron presidirá un encuentro del Consejo de Seguridad Nacional el miércoles para tratar el asunto, y se espera que continúe hablando con otros líderes mundiales para asegurar que cualquier respuesta sea coordinada.
«Cualquier decisión se adoptará bajo un estricto marco internacional. Cualquier uso de armas químicas es completa y totalmente aborrecible e inaceptable (…) y la comunidad internacional necesita responder a eso», añadió el portavoz.
Turquía, miembro también de la OTAN, dijo que el supuesto ataque con gas la semana pasada constituye un «crimen contra la humanidad» y que representa una prueba para la comunidad internacional, según el ministro turco de Asuntos Exteriores, Ahmet Davotglu.
«Este es un crimen contra la humanidad y un crimen contra la humanidad no debería pasar sin respuesta, lo que se debe hacer hay que hacerlo», declaró a los periodistas.
(Información de Andrew Osborn en Londres; Información adicional de Erika Solomon en Beirut, Jonathon Burch y Duygu Erdogan en Ankara. Traducido por la Redacción de Madrid; editado por Carlos Aliaga vía Mesa Santiago)
