Los pozos sépticos del Hospital Regional Universitario Jaime Mota de Barahona colapsaron y las aguas residuales se están vertiendo en las calles aledañas al centro, lo que representa un peligroso para los residentes del lugar.
El director del centro de salud, doctor Marcos Soto dijo que este es un problema prioritario, tras afirmar que están trabajando en la conexión del hospital al sistema sanitario para buscar una salida a esta situación que es preocupante.
“No podemos olvidar que en Barahona no hay plantas de tratamiento de aguas residuales, lo que afecta aún más la situación”, indicó.
