¡El pueblo dijo no! Cientos de personas ratificaron su oposición a que Loma Miranda no es negociables para la explotación minera, mediante consignas “Miranda no se negocia” y “Loma Miranda: parque nacional”, durante una marchar que partió desde los alrededores de la catedral de La Vega hasta la entrada de esos terrenos.
Monseñor Antonio Camilo, obispo vegano, pidió a la Virgen de las Mercedes que no permita que la zona sea destruida, durante un acto desarrolló en las inmediaciones de la montaña.
La marcha-caravana estuvo matizada por consignas en contra de la empresa Falcondo, de esta ciudad, interesada en explotar los yacimientos minerales localizados en el lugar.
La caminata-protesta fue organizada por la Iglesia católica, donde participaron sacerdotes, diáconos, presidentes de asamblea y feligreses de las provincias Monseñor Nouel y La Vega, así como de otras localidades de la zona nordeste del país.
Por igual, estuvieron presentes diputados, senadores, alcaldes y regidores de esos lugares, al igual que personalidades que se han destacado por sus luchas en beneficio de que en Loma Miranda sea preservada por Medio Ambiente, así como que sea declarada parque nacional.
La demostración de ayer marcó el inicio de la novena preparada por el obispado de La Vega, en ocasión de celebrarse el 24 de este mes el «Día de Las Mercedes». Monseñor Camilo expuso que con la actividad se consagraba la Loma Miranda a la patrona del pueblo dominicano “para que la cubra con su manto y la proteja con su amor y no permita que sea destruida por los depredadores”.
El prelado católico, quien con su intervención cerró la concentración realizada, solicitó a los legisladores que declaren a Loma Miranda mediante ley como área protegida y parque nacional.
A su juicio, el valor que tiene el espacio donde está localizada la Loma Miranda, unido a su condición de patrimonio cultural, influencia climática y de aportes eco-sistémicos al desarrollo económico de la zona “resulta incuantificable cuando se le intenta comparar con una ínfima generación de 250 empleos, según la proyección de la empresa interesada”.
De su lado, el sacerdote Rogelio Cruz amenazó con atrincherarse con unos 2,500 hombres y mujeres en la montaña si el Gobierno no entiende la exigencia del pueblo sobre este tema.
