Panamá.- El arancel excesivo que Colombia impone a productos de la Zona Libre de Colón (ZLC) es discriminatorio hacia Panamá e iremos a la Organización Mundial del Comercio para resolverlo, dijo el ministro de Comercio, Ricardo Quijano.
En declaraciones exclusivas a Prensa Latina, el titular de la cartera de Comercio e Industria, afirmó que es inapropiado lo que Colombia hace a Panamá pues no le resuelve nada a ellos y con las cosas que están pasando el Consejo de Gabinete y el gobierno deberían desarmar ese decreto.
El ministro explicó que con la próxima firma de un Tratado de Libre Comercio (TLC), todo producto originario panameño queda amparado, incluso algunos que se transforman en la ZLC, aunque se hacen en España, pero van con sello de origen panameño.
Pero no es el caso con los demás, específicamente el calzado y textiles de China, Tailandia o de otros países que en Panamá lo único que se hace es reexportar y Colombia les aplica aranceles que exceden las normas en una protección que no tiene razón de ser, indicó.
Quijano expresó que eso va en contra de todo: de la economía, del usuario, y no soluciona tampoco los problemas a su industria nacional como ellos pensaban, ni siquiera a sus trabajadores.
Quiero aclarar, explicó, que no es solamente a Panamá, sino que es un arancel que le han impuesto a cualquier mercancía que vaya a Colombia procedente de países que no tengan tratados preferenciales con ellos, pero a la larga es contra nosotros.
Pero reiteró que aunque el arancel es general, en realidad la medida es contra Panamá pues se sabe que el 95 por ciento de lo que Colombia tiene en calzado y textiles le llega por la ZLC desde China y otros países asiáticos.
Dijo que la producción nacional colombiana cubre solamente el 50 por ciento de la demanda en esos rubros y el resto llega por la vía de Panamá, entonces les están diciendo a la mitad de los consumidores colombianos que compren más caro porque seguirán gravando los de la ZLC.
Quijano estimó que cada país tiene la libertad de establecer aranceles, pero siempre y cuando cumpla con las normas internacionales vigentes y no se conviertan en instrumentos proteccionistas que afectan el comercio mundial.
Y el problema de Colombia, dijo, es que están violando las normas de la OMC al irse por encima del nivel permitido, y de alguna manera tienen que rectificar, por eso en el panel solicitado vamos a ejercer una presión fuerte, aunque eso se toma su tiempo.
El ministro alertó finalmente que la medida colombiana es contraproducente pues puede estimular el contrabando que beneficiaría a unos pocos colombianos y perjudicaría a comerciantes e industriales.
