El presidente de la Junta Central Electoral (JCE), Roberto Rosario, dijo este martes que el Tribunal Constitucional (TC), tiene el reto de conocer y fallar sobre el derecho o no de los descendientes haitianos a poseer la nacionalidad dominicana, cuya decisión ese organismo aceptará.
No obstante, sostuvo que no va a renunciar a su criterio de que la nacionalidad no es para todo el mundo.
Rosario se quejó de que mediante las redes sociales y los medios de comunicación, se ha lanzado una campaña negativa en su contra, la cual ha recibido con valentía, tristeza y dolor, porque mediante ella lo han tildado de racista, antihaitiano y xenófobo, por su planteamiento sobre el derecho a la nacionalidad dominicana que algunas personas quieren recibirla a cualquier costo o manera.
Expresó que el origen de esas críticas descansa en personas que piensan que la nacionalidad es un pastel barato que se puede adquirir sin importar las condiciones, ni los registros de nacimientos.
El presidente de la JCE calificó de injusto a aquellos que lo degradan de esa manera, porque la decisión que se ha tomado no es personal, sino que todo ha sido aprobado por el Pleno de la Junta en sus discusiones.
“Prefiero renunciar a la Junta, ya que estoy identificado plenamente con que no todo el mundo se merece la nacionalidad. Creo que la República Dominicana fue fundada por Duarte y restaurada por Luperón para que exista como nación”, indicó.
Destacó que cuando en los países no hay organismo de control que garantice las políticas públicas de registros civiles y electorales, se desintegran como República.
Defendió que la resolución emanada por el juez de la Suprema Corte de Justicia, Hugo Álvarez, en el 2005, quien emitió una sentencia de los principios sobre los criterios para obtener la nacionalidad dominicana.
Roberto Rosario habló del tema luego de inaugurar en la ciudad de La Vega, un moderno edificio que alojará la oficina de Registro Civil, Cedulación y Junta Electoral.